El neuromarketing es la aplicación de diversas técnicas pertenecientes a las neurociencias, al mundo de los negocios y el consumismo, gracias a ello, es posible conocer algunos aspectos de los hábitos consumistas y la relación que existe entre lo que piensa el consumidor y la conducta que muestra en un comercio.
El neuromarketing es el nuevo sistema catalogado como la mercadotecnia del presente siglo, estudia cómo se comporta la mente consumista con la publicidad, la ubicación de los productos o la distribución interior de los comercios. La finalidad es poner al descubierto las mentes de los consumidores, por ello, existen algunas iniciativas que están en contra de este tipo de estrategias, ya que parecen invadir la intimidad y los pensamientos personales de cada consumidor.
Evidentemente las empresas indican que utilizar el neuromarketing está sujeto a comprender cuáles son las necesidades del consumidor e intentar satisfacerlas. Parece que esto es jugar con ventaja y actuar manipulando la situación, seleccionando aquellos medios que permiten captar mejor la atención de los consumidores. Con esta nueva ciencia es posible predecir qué piensa un consumidor, las técnicas permiten conocer perfectamente los resultados de las campañas publicitarias que se realicen mediante la medición de diferentes parámetros, ventas, preferencias, marcas, etc.
Se puede conocer por qué se ha dejado de comprar un determinado producto y cuáles son las causas, se estudia cuál ha de ser la estrategia siguiendo a los consumidores y estudiando sus movimientos dentro del comercio. Cada gesto, cada opinión y el modo de actuar cuenta, todo ello se puede realizar a través de diferentes técnicas, ya sea mediante cámaras o personal del establecimiento. Todo se escudriña, el tiempo que se emplea en la adquisición de un producto, que es lo que llama la atención del usuario, en qué posición se encuentran los productos que le llaman más la atención, todo es tan estudiado que incluso asusta, no nos extraña en absoluto que se indique que invade nuestra intimidad.
Con todos los datos obtenidos se establecen diversos parámetros, la zona con mayor preferencia por los consumidores, la combinación de determinados productos en la estantería, la altura más aconsejable para aumentar las ventas de un determinado producto… todos estos puntos son de gran interés para los responsables de los comercios, ya que la mayoría de las decisiones de compra se toman en el establecimiento. aunque hay quien ya va con una lista preparada de lo que quiere comprar. Para este colectivo también se diseñan estrategias y al final se compran algunos productos que no estaban contemplados en la lista o se cambian por otras marcas, y todo gracias a una estrategia meticulosamente estudiada.
Es sorprendente, incluso existen técnicas en las que los investigadores llevan unas gafas con microcámaras para seguir el movimiento de los ojos de los consumidores identificando así donde están los puntos de interés. Más lejos van los empresarios estadounidenses, que incluso utilizan chips instalados en los carritos de compra para realizar un seguimiento extremo y detallado sobre todos los movimientos que realiza un consumidor.
El que creía que la publicidad era simplemente anunciar un producto está muy equivocado, una potente maquinaria de investigación se encuentra tras ella, para unos, con la finalidad de satisfacer al consumidor, para otros, con la finalidad de robarnos la voluntad y llevarnos por donde quieren como si de un rebaño de ovejas se tratase.
En cierto modo, esto nos recuerda a la publicidad subliminal, existen evidencias e incluso estudios científicos que muestran que las marcas influyen en los consumidores y que la publicidad accede hasta nosotros aunque no queramos. Llegamos a adquirir productos que no deseamos realmente pero que predominan en nuestra mente fruto de un bombardeo publicitario. La publicidad subliminal ha sido un tema discutido durante años y como siempre, han existido dos tipos de opiniones, en nuestra opinión, sí existe y las empresas intentan manejarnos a su conveniencia. Por cierto, un producto de calidad no necesita estas argucias para obtener el beneplácito de los usuarios.
En estos dos vídeos nos aclaran algunas de las preguntas que nos podemos hacer en torno al neuromarketing, se trata de una interesante ponencia que ha sido organizada por Universal McCann y el Periódico de la Publicidad.
Más información | Wikipedia
Más información | Science
Más información | Apuntes Gestión