Llegando el final del mes de agosto hay que empezar a hacerse a la idea de que pronto llegará el otoño (aunque muchos ya lo están deseando), con ello cambiará de nuevo nuestra alimentación para adaptarse a los productos de temporada y a nuestras necesidades, en buena parte, dejaremos los helados un poco al margen, para disfrutar de otros dulces caseros, y una de las estrellas de la próxima estación es el pastel de calabaza.
Aunque esta tarta no es tradicional en nuestra gastronomía, se ha convertido en una de las más populares en distintos países para disfrutarla acercándose el final del otoño, aunque ya sabéis que hay calabazas todo el año. Lo curioso es que los estadounidenses y los canadienses, donde el Pumpkin pie es un postre tradicional que se elabora principalmente para Acción de Gracias y Navidad, habitualmente utilizan calabaza en lata. No os la recomendamos bajo ningún concepto.
Pero no es del pastel de calabaza de lo que os queremos hablar, sino del molde para cocción y para conservación que podéis ver en la foto que ilustra estas líneas, y que seguramente a muchos de vosotros os gustará para vuestra cocina o para regalar.
El molde para hacer tarta de calabaza está fabricado en gres y tiene el color anaranjado característico de la corteza de la hortaliza. El plato o base es como la de cualquier molde clásico para hacer tartas con el borde rizado, tiene un diámetro de algo más de 26 centímetros, por lo que permitirá hacer pasteles de unos 25 centímetros de diámetro. La tapa tiene la forma de una calabaza tradicional, con su pedúnculo o rabito, y tiene una altura total de cerca de 14 centímetros.
Este molde para pastel de calabaza con tapa se puede utilizar en el horno y en el microondas, además se puede lavar en el lavavajillas, y por supuesto, no sólo servirá para hacer tartas o pasteles de calabaza, sino cualquier otro que queramos elaborar con la misma base, sea una quiche, un flognarde, una tarta de chocolate… Una vez hechos los pasteles, podremos presentarlos con la tapa en la mesa y también podremos guardarlos en el mismo molde con su tapa, protegiéndolo del aire y de lo que pueda haber en el ambiente.
Si queréis conocer más detalles de este molde para tartas de gres, podéis acceder a esta tienda online, su precio no llega a los 30 euros.