Tenemos una nueva joya en nuestra cocina, el molde para flores manchegas, y no es sólo una joya porque nos permitirá disfrutar de un dulce tradicional que nos encanta y que hasta el momento sólo lo habíamos podido comprar, sino porque entró por la puerta desprendiendo el cariño y la alegría con la que nos contagia Su, ‘la de los Webos-Fritos’.
A todos se nos dibujó una sonrisa cuando abrimos el paquete: «¡El molde de flores manchegas!», ya estábamos oliendo las flores manchegas crujientes y azucaradas con las que vamos a preparar unas merendolas que luego necesitarán penitencia. La receta ya la tenemos preparada, este año no se nos escapan las flores manchegas de nuestros dulces de Semana Santa.
Y agradecérselo de corazón a Su y familia que han buscado el molde para flores manchegas, cada día más difícil de encontrar, con el fin de hacernos más felices.
No se van a perder las recetas tradicionales Su, aquí estamos para dejarlas en esta ventana al mundo. Para los que las conocen, que deseen hacer las flores manchegas y quieran seguir degustándolas, y para las personas que no las conocen, que deseen probarlas.
Los dulces tradicionales quedan grabados desde la infancia, igual que lo hicieron nuestras abuelas y madres, ahora lo transmitimos nosotros. Nuestros hijos tendrán después en sus manos volcar los placeres de la cultura gastronómica de cada región, de cada pueblo… a nuestros nietos.