Es conocido por todos que la miel de azahar tiene propiedades relajantes, entre otros beneficios, pero con la finalidad de contribuir en la promoción de la miel de azahar que se produce en la Comunidad Valenciana, científicos del Laboratorio de Calidad de la miel y de los productos apícolas de la Comunidad Valenciana del Instituto de Ingeniería de Alimentos para el Desarrollo que se encuentra en la UPV (Universidad Politécnica de Valencia), se está realizando un análisis que ya lleva tres años de desarrollo, que muestre al completo las características de esta miel.
La intención es que se diferencie la calidad de la miel de azahar de la Comunidad Valenciana del resto de productos de la apicultura procedentes del mismo o de otros néctares. Esta Comunidad es una de las mayores superficies de cultivo de naranjos, que junto a otros árboles de cítricos, como el limón o la cidra, producen la flor de azahar.
La miel de azahar, además de ser un gran alimento con propiedades relajantes, destaca por su sabor y su aroma, es suave, penetrante, muy aromática y agradable en paladar. En muchas ocasiones se ha recomendado como tratamiento natural para combatir el insomnio o simplemente como relajante, pero no existía información científica que lo respaldara. A partir de este estudio del laboratorio mencionado, donde se muestra la calidad y las propiedades de la miel de azahar de la Comunidad Valenciana, se pretende una mayor distinción del producto tras revisar el Reglamento de la Marca CV.
Algunos de los proyectos que se están barajando para la miel de azahar de la Comunidad Valenciana son reconsiderar la exigencia de no pasterizar la miel, que aunque prolonga el tiempo de comercialización de la miel evitando la fermentación y la cristalización, no ofrece las mismas cualidades.
El Laboratorio de Calidad de la miel y de los Productos apícolas de la Comunidad Valenciana también trabaja en el desarrollo de nuevos productos elaborados con miel de la región, tanto de alimentos funcionales como de mieles con sabores (esto no nos hará tanta gracia). La miel de azahar, junto a la miel de romero, son de las variedades que más nos gustan, sin pasterizar, densas, para comerla a cucharadas como si fuera un caramelo… una miel cada vez más difícil de encontrar fuera del ámbito del apicultor.
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