Como sabemos, la resistencia que generan las bacterias a los antibióticos es una gran amenaza para la salud mundial, dicha resistencia provoca que una de las herramientas médicas más importantes sea ineficaz y se desproteja a seres humanos y animales de enfermedades que antaño eran perfectamente tratables. El uso de los antibióticos con fines no terapéuticos en el ganado es algo habitual en Estados Unidos, siendo un factor que contribuye de forma decisiva a generar esta resistencia, por ello, varios grupos y organizaciones luchan para que se evite el uso de los antibióticos con fines no terapéuticos.
En su momento, compañías como McDonald’s anunciaron que se abastecerían de pollos criados sin antibióticos, pero en relación a la carne de cerdo y a la carne de vacuno esta cadena de comida rápida no estableció un plan de trabajo para hacer lo propio. Por ello, organizaciones como US PIRG Education Fund pedían a la compañía que realizara avances en este sentido, ya que habían pasado tres años y no se había mencionado nada al respecto. Pues bien, finalmente McDonald’s anuncia una política de reducción del uso de carne de vacuno con antibióticos, un paso importante teniendo en cuenta que esta compañía es una de las mayores compradoras del mundo de carne de vacuno.
McDonald’s ha recibido mucha presión en el último año, recordemos que en el último informe titulado Chain Reaction IV, elaborado por un grupo de organizaciones medioambientales, de salud y consumo, se destacaba que las cadenas de comida rápida no avanzaban a la hora de eliminar los antibióticos en la carne de vacuno, y calificaban a McDonald’s con una “F”, una pésima calificación fruto de su inactividad para establecer un plan de trabajo para eliminar los antibióticos en la carne de cerdo y vacuno destinada a la elaboración de sus productos. Obviamente, al final la compañía ha tenido que reaccionar y establecer un plan de trabajo, aunque el cronograma concreto dando fechas sobre los pasos a seguir no termina de convencernos.
McDonald’s explica que esta es una tarea compleja y no se puede llevar a cabo de la noche a la mañana, por lo que el primer paso para reducir el uso general de antibióticos en la carne es ponerse en contacto con los productores y proveedores de sus 10 principales mercados de abastecimiento de este producto, para medir y comprender el actual uso de los fármacos en la cadena de suministros. Para 2020 se espera contar con la información necesaria para establecer los objetivos para la reducción del uso de antibióticos de importancia médica, y, a partir del año 2022, contará con información sobre los progresos realizados para alcanzar la meta de reducir los antibióticos de la carne en los 10 principales mercados de los que se abastece.
Es muy posible que las fechas de este plan de trabajo no se cumplan y se retrasen bastante, recordemos que en el caso de la carne de pollo, McDonald’s anunció que se abastecería de pollos criados sin antibióticos como mucho a finales del 2017, pero la tarea la inició este año y se espera que a finales del año que viene se cumpla su cronograma. McDonald’s comenta que este nuevo plan de trabajo se ha desarrollado durante los últimos 18 meses, tiempo en el que ha estado consultando a varios expertos en la materia, desde veterinarios y productores cárnicos, hasta expertos en salud pública. El plan de trabajo se centra en llevar a cabo un enfoque general del uso responsable de los antibióticos en los animales, es decir, proporcionar el fármaco a los animales enfermos y no como un modo de prevenir enfermedades y potenciar el crecimiento del ganado. También se baraja reemplazar estos fármacos por soluciones a largo plazo a fin de prevenir enfermedades y proteger la salud y el bienestar de los animales.
La compañía comenta que este anuncio se basa en los 15 años de trabajo sobre este tema, ya que en el año 2003 prometió que introduciría una política global sobre el uso de antibióticos en animales destinados al consumo humano, anunciando que prohibía el uso de antibióticos con fines no terapéuticos en animales que integraran compuestos que se utilizan en la medicina humana. Pero lo cierto es que simplemente fueron palabras soltadas al aire, esta promesa no se cumplió y quizá no se habría cumplido sin la presión de las organizaciones, asociaciones y consumidores. Otra promesa incumplida, en 2001 anunció que reduciría y eliminaría en Reino Unido y en el resto de Europa, el uso de alimentos procedentes de animales tratados con antibióticos, pasarán 20 años como mínimo hasta que esta promesa se haya cumplido.
Por tanto, no le servirá de nada hacer creer que ha estado trabajando en este tema durante todos estos años, en realidad se ha puesto manos a la obra hace poco y debido a las presiones. Obviamente, el discurso lo realiza a su conveniencia, cambiando la narrativa de los hechos, pero al final se ha dispuesto el plan de trabajo (lo podéis leer en este Pdf) y aunque es de agradecer por el elevado número de consumidores de sus burgers, los plazos se extienden demasiado.
En este comunicado, la cadena explica que está embarcada en la tarea de hacer un mejor McDonald’s, trabajando con socios y productores para abordar los principales desafíos, como la resistencia a los antibióticos. Asegura que continuará escuchando a sus clientes a fin de cumplir sus exigencias y superar expectativas en el día a día, en este caso, no estará mal que utilice un audiófono, ya que es una compañía “dura de oído”.
Foto 1 | Rockin’Rita