Según la AEPA (Asociación Empresarial de Pastelería Artesana de Madrid), los habitantes de la capital de España consumirán en estos días más de tres millones y medio de torrijas, por lo que parece evidente que Madrid será la capital de las torrijas. Hay que tener en cuenta que esta estimación se calcula en base a las 1.000 pastelerías miembros de la asociación, si añadimos las pastelerías que no están asociadas y las torrijas caseras que se consumirán, las cifras podrían de estos postres típicos incrementarse significativamente.
Como sabemos, las torrijas son un dulce típico que se acostumbra a disfrutar en las celebraciones de la Cuaresma, se trata de un postre documentado con más de 500 años de antigüedad. Según leemos en Wikipedia, inicialmente parece ser que se trataba de una elaboración indicada para la recuperación de las parturientas, las primeras recetas aparecen recogidas en el Libro de Cozina de Domingo Hernández de Maceras de 1607, poco a poco se convirtió en una elaboración típica y a principios del siglo XX se podían encontrar en cualquiera de las tabernas de Madrid, eran la tapa que acompañaba a los chatos de vino.
La asociación a las fiestas de la Cuaresma vino después, al parecer, la necesidad de aprovechar el pan y la imposibilidad de comer carne dados los motivos religiosos de la Cuaresma, impulsaron la elaboración de torrijas en Pascua. El representante de la Asociación Empresarial de Pastelería Artesana de Madrid indica que hace dos semanas que se iniciaron las tareas de elaboración de torrijas a fin de poder satisfacer la gran demanda, la crisis no parece haber hecho mella en este dulce, pero hay que tener en cuenta que se trata de una elaboración asequible y muy rica.
Según Esteban Fernández, para la población resulta más cómodo comprar las torrijas ya hechas, indicando que a partir de la incorporación de la mujer al mercado laboral, la elaboración de recetas de torrijas caseras ha ido decreciendo. El caso es que se espera un incremento de las ventas con respecto al año pasado. Personalmente, preferimos elaborar nuestras propias torrijas y para ello contamos con las clásicas torrijas, aunque antes elaboraremos el pan para torrijas, después será cuestión de ir disfrutando de las diferentes variantes, las torrijas de brioche, las torrijas de vino, las torrijas de chocolate, y disfrutar de todos los dulces de Semana Santa que nos sean posibles, pero siempre con moderación.
Estos días festivos son golosos e invitan a elaborar recetas como el Panquemao o Panquemado, unos deliciosos pestiños, unos buñuelos, una farinosa o farinà… y por supuesto, no pueden faltar las tradicionales monas de Pascua, la verdad es que se nos presentan unos días muy atareados en la cocina a fin de satisfacer a nuestros comensales. Y vosotros, ¿vais a cocinar vuestras propias recetas o vais a abogar por la comodidad y adquirir vuestros dulces de Semana Santa en las pastelerías?