Este viernes, el Parlamento Europeo dio a conocer la resolución sobre la enmienda 165 que pretendía que se prohibiera el uso de términos propios de los productos cárnicos, en las preparaciones alternativas vegetales, véase hamburguesa, salchicha, escalope, bistec… y su respuesta ha sido así de clara, los términos relacionados con la carne se pueden aplicar a los productos de origen vegetal, su nota publicada en la web lo resume así:
“Los eurodiputados rechazaron todas las propuestas dirigidas a reservar ciertas denominaciones a productos que contengan carne. Nada cambiará para los productos elaborados a partir de vegetales, que podrán seguir comercializándose con los nombres actuales.”
Recordemos que prohibir el uso de términos como hamburguesa, bistec, salchicha… en productos elaborados con materias primas vegetales a las que se les da la forma o tienen el aspecto que conocemos de estos productos alimenticios, era el objetivo de la industria cárnica y ganadera europea, con el apoyo de la Comisión de Agricultura del Parlamento de la Unión Europea.
Sobre esto ya os habíamos hablado en varias ocasiones, como en este post titulado ‘Se propone prohibir el uso de términos cárnicos en los alimentos vegetales’. Comentamos también las críticas realizadas por las asociaciones de derechos pro animales y de las empresas que comercializan productos vegetarianos y veganos como alternativa a los productos elaborados con partes comestibles de los animales, que, a nuestro parecer, tienen toda la razón.
Este sector responde a la acusación de la industria cárnica que argumenta que utilizar denominaciones como ‘hamburguesa vegetal’ o ‘salchicha de tofu’, provoca confusión entre los consumidores y que, además, se está aprovechando de la fama de un alimento para vender otro que no tiene nada que ver. La Comisión de Agricultura del Parlamento sugería que en lugar de ‘hamburguesa vegetal’, podría denominarse ‘disco vegetal’, así como ‘lonchas de seitán’, ‘rodajas de soja’…
En petit comité debemos deciros que nos da la risa, que la industria cárnica pretenda hacer creer que los productos vegetarianos y veganos que utilizan términos propios de los productos cárnicos confunden a los consumidores cuando siempre se acompaña dicho término del ingrediente base o de un adjetivo como ‘vegetal’, siendo totalmente aclaratorios, mientras ellos pretenden vender como hamburguesas de carne, salchichas de carne, albóndigas de carne, carne picada… un preparado (burger meat) que sólo contiene un 70% de carne, y el 30% restante pueden ser cartílagos, tendones, grasa, almidón, soja…
Pues debemos decir que nos alegra que el Parlamento Europeo haya rechazado la enmienda y que podamos seguir llamando hamburguesa vegetal a un preparado alimenticio que se ha concebido para sustituir a la hamburguesa que se hace con partes comestibles de un animal, recordemos que para algunas asociaciones veganas, la prohibición era una violación de los derechos humanos fundamentales de los veganos.
Otra suerte han corrido los productores de bebidas vegetales concebidas como alternativa a la leche, el sector lácteo sí tiene protegidos los términos con los que se denominan sus productos, leche, nata, yogur, queso, mantequilla, mazada… no pueden ser utilizados por los productos de origen vegetal, salvo excepciones como la leche de almendras y la leche de coco, sobre la mantequilla de cacahuete no tenemos la certeza en estos momentos.
Los productores de leche europeos consiguieron una normativa a su favor, precisamente por lo que comentábamos antes hablando de la industria cárnica, que utilizar los términos propios de los productos lácteos con productos vegetales confundía al consumidor y que se aprovechaban de su reputación, de ahí que este sector cárnico luchara por conseguir lo que había logrado la industria láctea.
La cuestión es que el Parlamento Europeo ha aprobado la enmienda 171 con la que ratifica la prohibición de que se utilicen términos lácteos, como ‘leche’ a cualquier preparado similar elaborado con un ingrediente vegetal, ‘queso vegetal’, ‘mantequilla vegetal’… a los productos que no se hayan producido a partir de la secreción mamaria de un animal, además, ahora se prohíbe cualquier alusión que recuerde a los productos lácteos en el etiquetado de los productos vegetales que los imitan, y tampoco se les permite aludir posibles beneficios para la salud y para el medio ambiente. Este es un tema controvertido, que abordaremos en más detalle, nos gustaría saber ¿qué os parece a vosotros?