Recientemente se han dado a conocer los resultados de la Encuesta de Cerveza Australiana Artesana 2017 elaborada por segundo año por Beer Cartel, un club y una tienda online especializada en la venta de cerveza artesana que cuenta con más de 1.000 referencias de Australia y de otros países. Según los resultados de esta encuesta, la mayoría de los consumidores australianos quieren saber de quién es la cerveza artesana que beben, a esto hay que añadir que quieren que se ponga en marcha un sello o logo, que acredite que la cerveza que están tomando procede de una cervecera australiana independiente.
Los australianos reivindican algo parecido a lo que ya funciona en Estados Unidos o en el Reino Unido, país en el que hace unos meses se dio a conocer un nuevo sello que identifica la cerveza que proviene de las microcerveceras. La cerveza artesana representa un segmento de mercado con un elevado ritmo de crecimiento, cada día se suman consumidores al deseo de disfrutar de cervezas que nada tengan que ver con el sabor estandarizado de la cerveza industrial. Es por ello que las grandes compañías y cadenas de supermercados quieran aprovecharse de esta popularidad intentando hacerse con estas pequeñas cerveceras, al final, el consumidor no sabe si se mantiene la identidad de la cerveza o está en manos de estas grandes empresas, que sólo persiguen el beneficio económico y no prodigan la misma pasión por la elaboración de cerveza.
Australia, como otros países, está experimentando un boom de la cerveza artesana, las previsiones muestran que este sector crecerá de forma aún más significativa en los próximo años por su potencial para crear empleo y dinamizar el turismo, así lo explicaba la Asociación de Cerveceros Independientes de Australia (Australian Craft Brewers) en un informe sobre el crecimiento del sector y del que hablábamos en este post. Esta industria es para algunos expertos joven y emocionante, pero necesita el respaldo gubernamental, ordenamiento y transparencia, ya que es el modo de no defraudar a los consumidores y mantener la trayectoria de crecimiento.
En la Encuesta de Cerveza Australiana Artesana 2017 participaron más de 17.000 consumidores, las principales conclusiones son las siguientes:
Un 64% de los consumidores quiere saber quién es el verdadero responsable de la cerveza que consume. Se considera que la bebida es un producto artesano elaborado con los mejores ingredientes, su producción es limitada y su origen tiene un sentido. La propiedad de la cervecera es importante porque es parte de una historia única y es propiedad de personas reales y no de gigantes corporativos.
Existe una fuerte preferencia por la cerveza artesana elaborada por cerveceras australianas independientes, la encuesta refleja que el 99% de los participantes así lo desean. También se valoran las cervezas que elaboran maestros cerveceros en otras cerveceras, algo similar a lo que realizan algunas empresas dedicadas al mundo del vino.
Un 23% de los encuestados afirma que no les desagrada adquirir una cerveza artesana perteneciente a una gran multinacional, por otro lado, a un 32% de los encuestados no les importa que sea una marca de supermercado. Recordemos que las marcas de supermercado son, en realidad, de cervezas artesanas elaboradas por pequeñas cerveceras a las que las cadenas de supermercados colocan su propia etiqueta, es decir, podemos hablar del negocio de la cerveza artesana de marca blanca.
Hasta un 82% de los encuestados considera que es necesario identificar si una cerveza es de una cervecera australiana independiente, el sello de identidad tendrían un gran impacto en su decisión de compra. Hay que decir que el año pasado ya se planteó la creación de un sello de distinción, de ahí que en la encuesta de este año se haya incluido el tema, así que a raíz de los resultados posiblemente no se tarde en anunciar la creación de un logotipo oficial que identifique a la cerveza procedente de cerveceras independientes.
Según los resultados, la mejor cervecera artesana de Australia es Pirate Life, que ha desbancado de la primera posición a Feral Brewing, cervecera que se alzó el año pasado con este título. El estilo de cerveza más consumido en Australia es pale ale, un subtipo de cerveza ale obtenida mediante fermentación templada que destaca por tener un color más claro que otras cervezas de tipo ale, debido a que se elabora con un variedad de malta clara en mayor proporción.
En definitiva, es probable que este movimiento de la identidad de la cerveza artesana se traslade a otros países como España, recordemos que los datos de crecimiento de este sector han sido similares a los de Australia entre el año 2006 y 2016. Muchos consumidores disfrutan de estas bebidas, y también quieren que exista una historia, una identidad, una cercanía o proximidad, algo que consideran que las grandes compañías no pueden ofrecer. Podéis conocer todos los datos de la encuesta a través de este artículo publicado en la página web de Beer Cartel.