Según un informe de la Comisión Alimentaria de Japón, los alimentos obtenidos de animales clonados son seguros y no presentan ningún riesgo para la salud humana. Según este informe, tanto el contenido nutricional como el potencial alergénico de las carnes o la leche que se puedan obtener de estos animales son idénticos a los pertenecientes a animales tradicionales. De todos modos, se trata de un borrador que no estará concluido hasta dentro de unos días, pero es un paso más en la autorización de la comercialización de alimentos a partir de animales clonados.
Este estudio será entregado al Ministerio de Sanidad del país y ha sido el segundo paso tras haber realizado una consulta ciudadana sobre este tipo de alimentos, así se indica en la publicación digital The Daily Yomiuri. A partir del mes de marzo será responsabilidad del Ministerio de Agricultura del país la aprobación o no de la comercialización de estos productos, aunque después de conocer el borrador que indica que los alimentos obtenidos de animales clonados son seguros, probablemente el veredicto final será positivo.
Contrariamente en Europa, el rechazo a este tipo de alimentos se hizo evidente e incluso la EFSA (Agencia de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea), que en su momento respaldaba la producción y comercialización de alimentos clonados, manifestó posteriormente en julio del año pasado dudas sobre la salubridad de estos alimentos hasta que no se realizaran nuevos estudios, rechazando por el momento las carnes y derivados de animales clonados.
Hay que decir que el tema en Europa está vigente y todavía no se ha adoptado en firme una prohibición sobre la clonación animal para la obtención de alimentos a pesar de la gran oposición existente por parte de la mayoría de los ciudadanos europeos. Quizá Bruselas esperaba estudios como el que se va a presentar en Japón para frenar la prohibición.
En el mencionado estudio japonés se indica que los animales clonados y sus descendientes son seguros, la explicación que nos proporciona sobre la elevada tasa de mortalidad de estos animales la atribuye a las técnicas que se emplean de clonación. En nuestra opinión, si el procedimiento de clonación no ofrece las máximas garantías, no es seguro, los animales resultantes pueden representar un riesgo a corto o largo plazo.
El estudio japonés influirá seguramente en las decisiones adoptadas hasta el momento en la Unión Europea y quizá se levanten las barreras a la producción y comercialización de animales clonados y alimentos derivados. La alimentación biotecnológica obligada será una realidad, pero también la alimentación clonada.