Es una satisfacción que después de la primera cucharada de estas Lentejas con manzana y aguacate te digan: ‘Quiero lentejas todos los domingos’ (cuando suelen venir a comer), sorprende más gratamente aún cuando te lo dice una persona fiel a la cocina tradicional, pues como veréis a continuación, esta receta de lentejas no es nada convencional, pero en casa nos gusta mucho más esta legumbre combinada con ingredientes frescos, sobre todo a medida que se adentra la primavera, es también ideal para el verano.
No obstante, esta receta de lentejas con manzana está exquisitamente aromatizadas con jengibre, hierbabuena, cilantro, ajo… también son un buen plato para los meses fríos, unas lentejas recién hechas conservando su calor, no se enfriarán con los añadidos, y reconfortará además de deleitar al paladar. Esperamos que os animéis a probarlas y que os digan lo mismo que a nosotros, que quieren repetir.
Ingredientes (4 comensales)
- 300 gramos de lentejas (puedes utilizar lentejas pardinas o lentejas de Puy)
- 900 gramos de agua
- 10 gramos de raíz de jengibre
- 2 chalotas
- 1 c/c de comino
- 2-3 ramitas de tomillo
- pimienta negra
- sal
- aceite de oliva virgen extra.
Para la ensalada
- 1 aguacate
- 1 manzana (granny smith, kanzi, ariane, fuji...)
- 2 dientes de ajo
- 1 cebolla tierna
- 12 gramos de raíz de jengibre
- 2 c/s de cilantro fresco
- 1 c/s de hierbabuena o menta
- 2 c/s de zumo de limón natural
- pimienta negra recién molida
- sal
- 1 guindilla dulce.
Elaboración
Lava bien las lentejas y escúrrelas. Ponlas en una olla convencional y añade el agua, la raíz de jengibre previamente pelada, las chalotas peladas y cortadas en dos trozos, el comino, el tomillo y salpimenta al gusto. Finalmente añade un chorrito de aceite de oliva virgen extra y pon la olla al fuego. Cuando rompa a hervir, reduce el fuego al mínimo y cuece (continuando con la olla tapada) durante 25 minutos o hasta que las lentejas estén tiernas.
Cuando las lentejas estén hechas, retira las ramitas de tomillo, el jengibre y las chalotas, aunque éstas se pueden dejar si son del agrado de los comensales. Como comentábamos, este plato de lentejas es tan bueno tomándolo caliente como frío, quedará poco caldo, pero no es cuestión de comer una sopa o un guiso caldoso de lentejas.
Prepara la ensalada o complemento que harán que las lentejas estén extraordinarias, solemos preparar más cantidad de la que en principio podría considerarse necesaria para que cada comensal pueda añadir más a su plato si lo desea.
Pela la manzana y córtala en dados, haz lo propio con el aguacate y mézclalos en un bol, riega con el zumo de limón para que no se oxiden, pela y pica en brunoise la cebolla tierna, el jengibre y el ajo (al que previamente le retirarás el germen) rállalos, pica bien fino el cilantro y más groseramente la menta.
Incorpora todos estos ingredientes al bol de manzana y aguacate, salpimenta al gusto y si lo deseas, añade un hilo de aceite de oliva virgen extra, mezcla bien. Finalmente, añade la guindilla dulce, despepitada y cortada bien fina.
Emplatado
Sirve las lentejas en platos hondos y en el centro presenta la ensalada de manzana y aguacate, después el comensal deberá mezclar en el plato o ir combinando cucharadas, a su gusto. ¡Buen provecho!
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria