Nuevas investigaciones muestran que resulta muy beneficioso incluir en la dieta legumbres para prevenir enfermedades crónicas como la obesidad, las enfermedades cardiovasculares, intestinales o para reducir los niveles de colesterol entre otras patologías. Las legumbres son un grupo de alimentos formados por los frutos secos de las leguminosas o fabáceas, que se han cultivado durante siglos por diferentes culturas, siendo una importante fuente nutricional que ofrece altas cantidades de hidratos de carbono, proteínas, lípidos, fibra, etc.
Junto a los cereales y otros productos, las legumbres han sido uno de los alimentos básicos de la humanidad. Desgraciadamente este alimento tan importante es menos consumido en aquellos países cuyo nivel de vida es superior. En España por ejemplo, a medida que ha ido creciendo el nivel de vida desde la década de los 70, el consumo de legumbres ha ido reduciéndose a la vez que se incrementaba el consumo de otros alimentos. Estudios como los que nos presentan los investigadores canadienses y estadounidenses, deberían servir para que la población tomara nota y aumentara el consumo de legumbres como prevención de las enfermedades y cuidar la salud en general.
Los estudios realizados se han presentado en el Pulse Health & Food Symposium (simposio cuya iniciativa parte de la asociación industrial Pulse Canadá, formada por productores y comerciantes canadienses). La cita que tuvo lugar el día 4 y 5 de febrero en Toronto (Canadá), aglutinó a más de 140 expertos de distintas áreas a los que se les dieron a conocer siete estudios clínicos humanos que mostraban la relación existente entre comer legumbres y la salud.
Los resultados de las pruebas clínicas realizadas muestran, por ejemplo, que legumbres como las lentejas, las judías o los guisantes son alimentos efectivos para reducir los niveles elevados de colesterol gracias a sus efectos hipocolesterolémicos. También se mostró que estos alimentos son eficaces para mejorar la salud intestinal o luchar contra determinadas enfermedades cardiovasculares. Los resultados clínicos presentados mostraban también que era interesante incluir las legumbres en la alimentación como alimento preventivo contra la obesidad o en su defecto, a quienes ya padecen esta enfermedad, mejorar su salud arterial y mejorar el tratamiento de enfermedades derivadas como puede ser la diabetes tipo II.
Lo cierto es que en la red podemos encontrar diversos estudios en los que ya se destacaban los beneficios que hemos indicado e incluso se muestra que las legumbres están asociadas a una menor incidencia de determinados tipos de cáncer. Es una lástima que las legumbres hayan perdido tanto terreno en la alimentación española y más sabiendo que es uno de los alimentos contemplados en la dieta mediterránea. Pero recordemos que la dieta mediterránea se abandona a pesar de la difusión a nivel científico de los grandes beneficios que ofrece. La causa de ello es la misma que ha provocado la reducción del consumo de legumbres, el aumento del nivel y la calidad de vida.
Los expertos aconsejan el consumo de legumbres por el aumento que se está dando en la población sobre problemas de salud, de hecho, indican que las legumbres son una prescripción médica si lo que se pretende es poder disfrutar de una vida sana. Quizá la época de crisis económica que se está viviendo contribuya a retomar los hábitos saludables de antaño, donde los platos de bajo precio, como las legumbres, eran más cotidianos y habituales de la mesa. Ahora esperaremos a que publiquen los resultados detallados de cada ensayo para conocer con mayor profundidad todos los beneficios que ofrecen los frutos secos de las leguminosas.
Vía | Finanzas