Año tras año las importaciones de miel china baten récords en España, China se ha consolidado como el primer proveedor de este alimento en nuestro país, miel que según denunciaba en el año 2011 la asociación de agricultores AVA-ASAJA, podría estar utilizándose para realizar mezclas con otros tipos de miel sin informar a los consumidores de ello. Esta miel se considera de peor calidad y se sospecha que puede integrar antibióticos, metales pesados y productos fitosanitarios. Claro, que aunque España sea líder en la importación de miel china, otros países también son grandes importadores, de ello hablábamos en el post La miel china endulza el mundo.
Las importaciones de miel china aumentan año tras año en España, en el año 2007 alcanzaban las 3.294 toneladas, en el año 2008 la cifra casi se duplicó hasta llegar a las 6.167 toneladas, en el año 2009 la cifra era similar y el volumen importado fue de 7.773 toneladas. Pero de nuevo, en el año 2010 vuelve a experimentarse un notable crecimiento, importándose nada menos que 11.327 toneladas, cifra similar se importó en el año 2011 con 11.330 toneladas. Los años 2012 y 2013 experimentan otra fuerte subida alcanzando las 14.232 y las 14.751 toneladas de miel respectivamente. Esta invasión de miel china es preocupante, supone una competencia desleal para los productores españoles por sus reducidos costes y por la permisividad legislativa china en lo que respecta al uso de antibióticos, productos fitosanitarios, etc., algo que la UE prohíbe.
En definitiva, desde el año 2007 se han multiplicado por 4’5 veces las importaciones de miel china en España, los precios a los que se comercializa esta miel es el más bajo a nivel comunitario, siendo de 1’30 euros el kilo, mientras que los costes de producción de la miel española se sitúan entre los 2’29 y los 6’6 euros por kilo. Varios motivos han provocado que los sindicatos y organizaciones agrarias reclamen a los Ministerios de Agricultura y Sanidad que tomen cartas en el asunto, tal y como ya hicieron el año pasado ante la Unión Europea. En aquel entonces se remitía una carta al Comisario Europeo de Comercio, advirtiendo de la competencia desleal generada por la invasión de miel china a un precio con el que es imposible competir.
Un precio tan bajo no hace más que levantar sospechas sobre los métodos de producción que se llevan a cabo, y sobre el posible incumplimiento de la normativa comunitaria. La miel china distorsiona el mercado y además no está exenta de riesgos sanitarios, su calidad no tiene nada que ver con la miel que se produce en nuestro país. Gracias a la carta enviada el año pasado al comisario europeo se han puesto en marcha una serie de acciones para recabar información sobre los controles que se realizan en la miel procedente de otros países, tanto de países comunitarios como de terceros países, a finales de mes estará disponible esta información.
Es evidente que las importaciones crecen porque la miel china es demandada por empresas españolas o que están implicadas en el comercio español, y que quizá están utilizando para realizar mezclas abaratando costes, por lo que pueden comercializar el producto a un precio inferior. Estas mezclas no permiten garantizar la trazabilidad y tampoco dan garantías sanitarias, recordemos que la legislación china no es tan restrictiva como la de la Unión Europea, por lo que es fácil deducir que esta miel puede contener productos prohibidos como los nombrados anteriormente. No puede comercializarse miel con restos de antibióticos, aunque la cantidad sea insignificante, de ello hablábamos en el post ¿Nos la dan con miel china?
COAG pide la armonización en los controles fronterizos veterinarios, así como los controles del mercado interior de la Unión Europea, estas importaciones de miel china barata y de baja calidad perjudican seriamente los intereses de los apicultores europeos y especialmente los intereses de los apicultores españoles. El sindicato agrario considera que las reglas del juego deben ser las mismas para productores comunitarios y productores de terceros países. Nuestro país se ha convertido en el primer mercado de la miel china de peor calidad, como en otras ocasiones volvemos a reivindicar medidas proteccionistas que eviten la destrucción del tejido apícola de nuestro país.
Hemos buscado miel 100% española en algunos centros comerciales y se puede decir que prácticamente es inexistente (afortunadamente no nos hace falta porque compramos directamente al apicultor), en el caso de Carrefour, todas las marcas que se ofrecen indican en la etiqueta que se trata de miel procedente de terceros países, pero sin nombrar cuáles. Sin ánimo de dar publicidad, sólo en Mercadona encontramos miel de flores en cuya etiqueta reza el mensaje «Miel 100% española cosechada por apicultores del país».
Como comentábamos, nosotros adquirimos la miel directamente al apicultor, desde que nuestra familia dejó de desempeñar esta labor. Quizá es más cara (aunque no siempre es así) pero merece la pena, no tiene comparación la miel pura con esas mezclas del supermercado que no se sabe lo que contienen. Por calidad y por salud, comprar miel española ayuda y nos ayuda.
Foto 1 | Blumenbiene
Foto 2 | Emmajanehw