En el mes de agosto del año pasado se realizó la cata de la hamburguesa in vitro creada por investigadores de la Universidad de Maastricht (Países Bajos), recordemos que según los expertos, la producción de carne de laboratorio era el futuro y que permitiría satisfacer parte de la demanda alimentaria que se va a generar en las próximas décadas. El coste de esta carne cultivada in vitro era desorbitado, en el proyecto se invirtieron 240.000 euros, lo que convertía a la hamburguesa en la más cara de la historia, a todo esto hay que añadir que la prueba de la hamburguesa fue satisfactoria, pero los expertos que la probaron reconocieron que no se trataba de una delicia.
El siguiente reto según Mark Post, el investigador jefe responsable del proyecto, es reducir el coste de la producción de la carne in vitro además de otros obstáculos que se deberán superar, auguraba que en una o dos décadas la producción sería viable y rentable. Para algunos esta es una gran solución, sostenible y capaz de contribuir a garantizar la seguridad alimentaria, sin embargo, otros investigadores advierten que la viabilidad económica de la carne in vitro es el mayor desafío que se debe superar para quienes apoyan este tipo de nuevas tecnologías.
Otros problemas asociados a la carne de cultivo se pueden superar, pero existen barreras como la económica que delatan que la viabilidad de la nueva tecnología no es tanta como se esperaba, es todo un desafío intentar abaratar costes hasta llegar al coste de la producción tradicional de carne. Este es el tema que se ha tratado en una nueva investigación desarrollada por expertos de los Países Bajos, según sus conclusiones, se podrían superar los problemas organolépticos y lograr crear una carne aceptable por los consumidores, pero la viabilidad económica es la mayor amenaza o escollo para la nueva tecnología, algo que podría terminar aparcándola.
Según el investigador Johannes Tramper de la Universidad de Wageningen, la competencia de la carne tradicional en lo que respecta a costes de producción es el verdadero problema, añade que para que la carne in vitro fuera competitiva, el precio de la carne convencional debería aumentar de forma significativa. Los expertos responsables del proyecto de la carne in vitro creen que la carne tradicional se convertirá en un alimento de lujo que se comercializará a un precio prohibitivo debido a la demanda creciente de alimentos a consecuencia del aumento de la población mundial. Quizá la producción tradicional podría aumentar su coste en las próximas décadas, pero aún así, será complicado poder equiparar el coste de la carne de laboratorio al de la carne de producción tradicional.
Los responsables del nuevo estudio explican que las evidencias apuntan al incremento de la demanda mundial de carne, esto se traducirá en un aumento de la contaminación ambiental, un incremento del consumo energético, del sufrimiento animal, problemas en la disponibilidad de materias primas para alimentar al ganado, etc. Por ello ven con buenos ojos la carne de cultivo utilizando las células animales, una alternativa que carece de las desventajas que tiene la carne tradicional, pero además del coste existe otro problema a superar, consideran que estas ventajas no garantizarán que los consumidores quieran comer este tipo de carne.
Los investigadores de la Universidad de Wageningen explican que es fundamental contar con la aprobación de la sociedad, muchas personas ven con buenos ojos el proyecto y lo ven como una fórmula esperanzadora ante los problemas generados por la carne tradicional, otros en cambio consideran que es algo antinatural, este tipo de debates estarán siempre presentes. Para quienes se preocupan por el bienestar animal es una buena alternativa, los animales sólo deben someterse a una pequeña biopsia para poder extraerles las células madre musculares e iniciar la producción.
Este tipo de debates quedan relegados a un segundo plano cuando se habla de costes de producción, el factor económico da un giro de 180 grados, los investigadores explican que existe un abismo en el gasto entre ambos métodos de producción, aunque se lograra abaratar el coste de producción significativamente, según los estudios, la carne de cultivo estaría por encima del precio de la carne tradicional, de ahí que apunten que deberían producirse cambios que provocaran que la producción tradicional tuviera precios prohibitivos.
La deducción es que deberá avanzar mucho más esta tecnología, porque esperar a que se produzcan los cambios indicados no tiene mucho sentido. La carne in vitro no tiene mucho futuro de momento, ya veremos qué ocurre dentro de unos años. Podéis conocer todos los detalles del estudio realizado a través de este artículo publicado en la revista científica Trends in Biotechnology.