¿Os habéis preguntado alguna vez si la fruta congelada se debe lavar antes de consumirla? Es muy probable que no, que igual que las verduras congeladas se ponen a cocinar directamente de la bolsa, las frutas congeladas se incorporan directamente al vaso, al bol, a la batidora o donde corresponda, según cómo se van a consumir, y listo.
Pero atención a esto, porque en una de las preguntas que responde Mercadona a través de su web, encontramos el siguiente texto: “Las frutas congeladas, ¿deben lavarse antes de consumir? Las frutas enteras congeladas que vendemos ya están lavadas previamente a excepción de las frambuesas del Mix de Frutos Rojos ya que por su fragilidad no admiten lavado previo.”
Entonces hemos procedido a buscar más información sobre si las frutas congeladas se deben lavar antes de consumirlas y lo cierto es que apenas hemos encontrado nada, y mucho menos mirando las fotos de las bolsas de fruta congelada que venden los distintos supermercados, Carrefour, La Sirena, Mercadona, Aldi, Lidl… Pero, claro, ¿y si se había incluido esta información recientemente en los envases?
Así que hemos ido a Mercadona, que es quien explica que las frambuesas congeladas no están previamente lavadas, y hemos comprado una bolsa de mix de frutos rojos para comprobarlo y enseñároslo, así que podéis ver toda la información que proporciona en las fotos de la parte delantera y de la parte trasera. En ningún momento indica que se deba lavar antes de consumir, que esté parcialmente higienizado, que se deba lavar antes de consumir…
Sabemos que durante el proceso de producción y congelación muchas frutas se lavan y a veces se blanquean antes de ser congeladas con el objetivo de eliminar bacterias, pesticidas y otros contaminantes. Pero las frutas que son más delicadas pueden no someterse a este proceso para que no se estropeen.
También sabemos que la congelación no elimina todas las bacterias, así como otros posibles elementos contaminantes. Por ello, las agencias de seguridad alimentaria suelen recomendar lavar las frutas congeladas antes de consumirlas, sobre todo si se van a tomar crudas en batidos o en postres.
¿Por qué en las etiquetas de las frutas congeladas no especifican si se deben lavar o no cuando se van a consumir o a incorporar a una receta? Suponemos que porque no hay una normativa al respecto, más allá de la especificada en el Reglamento (CE) nº 852/2004 sobre la higiene de los productos alimenticios, que entre otras cosas, establece que los fabricantes deben asegurar que los alimentos se manipulan cumpliendo con las normas de higiene en todas las etapas de la cadena alimentaria.
Así que se puede entender que, aunque las prácticas de higiene y seguridad alimentaria no incluyen una norma explícita sobre el lavado de frutas antes de congelarlas, los operadores de las empresas productoras, procesadoras y envasadoras incluyen el proceso de higienización para garantizar la seguridad de su producto.
Pero ya hemos visto que no es del todo así, y da la sensación de que no se le dé importancia a que las frambuesas del mix de frutos rojos congelados no están lavadas y que el consumidor final tampoco las va a lavar porque seguramente considera que no hace falta. Y lógicamente, podemos pensar que no sólo es así con el producto de Hacendado (Mercadona), además, sobre los riesgos sanitarios de la fruta congelada no hace mucho tiempo que hubo una alerta.
La AESAN comunicó en 2022 una alerta sanitaria en España sobre la presencia del virus de la Hepatitis A en frutas del bosque congeladas procedentes de Bélgica, y la distribución inicial del producto se realizó en las comunidades autónomas de Andalucía, Baleares, Cataluña, Castilla y León, Murcia, Comunidad Valenciana y País Vasco, podéis recordarlo aquí.
Entonces, ¿qué hacemos? ¿Debemos lavar los frutos rojos congelados para evitar posibles intoxicaciones alimentarias? Pues dado que la información que tenemos puede ser confusa, puede ser prudente lavar las frutas congeladas si se van a consumir en crudo y no sería necesario si se van a cocinar en salsas o mermeladas, ya que el proceso de cocción sería suficiente para destruir la mayoría de patógenos.