No nos sorprende en absoluto el resultado del estudio que ha dado a conocer el MARM (Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino) a través del Observatorio del Consumo y la Distribución Alimentaria que, a pesar de ser muy poco significativo, la compra de alimentos a través internet es muy escasa.
El estudio se ha realizado mediante una pequeña encuesta telefónica realizada a tan solo mil consumidores y doscientos profesionales de la distribución de alimentos, no obstante se contemplaron ciertos criterios como la edad, el sexo, los miembros en la familia o el lugar de residencia de los consumidores y el canal de compra y la ciudad de los distribuidores. A pesar de que en los dos últimos años ha aumentado la compra de alimentos a través de internet, continúa siendo muy escasa.
En el año 2008, alrededor del 4’7% de la población compraba productos de alimentación en la red, los datos actuales reflejan que esta cifra se ha visto aumentada casi en un 3%, por lo que a día de hoy la cifra de consumidores que opta por comprar alimentos a través de las tiendas online asciende al 7’6%. Con respecto a los distribuidores que utilizan internet para ofrecer sus productos, la cifra asciende a un 25’7%.
El estudio basado en la mencionada encuesta destaca que la edad media de los consumidores que compran alimentos a través de internet es de 45 años, principalmente hombres, cuyas familias están compuestas por 3’4 miembros y residen en poblaciones con una media de entre 10.000 y 50.000 habitantes.
Como indicábamos al inicio, no nos sorprende la baja cifra de consumidores que compra alimentos por internet, seguramente muchos de vosotros recordaréis que el pasado mes de mayo os realizamos esta pregunta en este post, y como podéis revisar, la mayoría de respuestas fueron que se compra en internet casi cualquier cosa, siendo los productos de alimentación frescos los menos requeridos en este medio comercial.
Los motivos principales son que se trata de alimentos perecederos y gusta verlos, olerlos, tocarlos (si es posible), que el vendedor nos los prepare a nuestro gusto, disfrutar del paseo y de la compra in situ además de apoyar a los mercados y tiendas de alimentación de barrio, etc. Son los productos de alimentación menos perecederos y más difíciles de encontrar en los establecimientos habituales, los que suelen ser más susceptibles de ser adquiridos a través de la red.
Tanto por gusto como por desconfianza, comprar alimentos online es algo que crece a un ritmo muy lento, mucho más que en otros sectores, como el de los libros que está en primer lugar, o la moda, que recientemente ha despuntado superando a la venta de billetes de avión. No sólo se trata de comodidad, la razón principal es el precio, poder comprar más barato hace que aumenten las ventas en internet, cosa que no se da en el sector de la alimentación, pues cuesta lo mismo o más comprar en internet que en un comercio a pie de calle. ¿Compraríais alimentos a través de la tiendas online si la cesta de la compra resultara más económica?