Hace unos días hablábamos de la evaluación realizada por el IARC (Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer) sobre el aspartamo y de cómo la OMS (Organización Mundial de la Salud) podría considerar el aspartamo como cancerígeno, dictamen que se dará a conocer el próximo 14 de julio. Como ya comentamos, si se determina que el aspartamo sea incluido en la categoría 1ª o 2ª de la clasificación por categorías del IARC, supondría un gran varapalo para la industria de la alimentación y las bebidas.
Pues bien, hoy podemos saber que la industria de la alimentación y las bebidas ve que están apareciendo conclusiones precipitadas, y la Asociación Internacional de Edulcorantes, advierte de la reacción exagerada sobre el aspartamo, ya que a pesar de que no se ha dado a conocer ningún dato oficialmente, se ha producido una reacción en cadena contra este edulcorante no calórico por un supuesto riesgo de cáncer. La industria de la alimentación y las bebidas, la Asociación Internacional de Edulcorantes, y la Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido (FSA), comentan que no se puede especular sobre la decisión del IARC hasta que se conozcan los datos y detalles de la investigación.
Por otro lado, se recuerda que el IARC no es un organismo de seguridad alimentaria, y en la actualidad el Comité Mixto FAO/OMS de Expertos en Aditivos Alimentarios (JECFA), está llevando a cabo una actualización de la evaluación de riesgos y seguridad del aspartamo, en base a lo facilitado por el IARC, por lo que comentan que no se pueden sacar conclusiones hasta que se publiquen ambos informes.
Desde la Asociación Internacional de Edulcorantes (ISA) se recuerda que el aspartamo es uno de los ingredientes que han sido investigados más exhaustivamente en la historia, y más de 90 agencias de seguridad alimentaria de todo el mundo lo han declarado seguro, incluida la EFSA (Agencia de Seguridad Alimentaria de la Unión Europea), de la que se indica que ha realizado la evaluación de seguridad del edulcorante más completa hasta la fecha, pero hay que recordar que se hizo en el año 2013 y desde entonces, se han realizado muchos estudios que han aportado nuevos datos.
El IARC es responsable de evaluar el peligro y no el riesgo, esto significa que el análisis realizado no considera si los valores actuales de aspartamo presente en los alimentos y bebidas aumentan o no el riesgo de cáncer. Las partes interesadas intentan minimizar el impacto de la noticia y ofrecen una explicación que posiblemente más de un consumidor cuestione. Recordemos que con determinados aditivos que habían sido aprobados inicialmente hace años, a medida que aparecían nuevos estudios se hacían modificaciones, como reducir la ingesta máxima tolerable, y al final se consideró prohibirlos al constatar que no existía ningún nivel de seguridad, un ejemplo que podemos citar es el dióxido de titanio.
Algunos expertos comentan que las recomendaciones del IARC indican que un compuesto tiene el potencial de causar cáncer, pero no explican si es probable que causen cáncer cuando se consumen en una cantidad realista. En lo que estamos de acuerdo es en que no se pueden adelantar acontecimientos, será necesario esperar al próximo 14 de julio para conocer toda la información, ya que será el día en el que los resultados de las evaluaciones realizadas podrán consultarse en la revista científica The Lancet Oncology, así como en la página de la OMS.