Nos ha sorprendido una entrevista realizada por el periódico alemán Focus on Line al Premio Nobel de Medicina 1995 y bióloga molecular Christiane Nüsslein-Volhard. Al parecer, la experta considera que la agricultura ecológica no es tan respetuosa con el medio ambiente como pueden creen muchas personas. Evidentemente la experta es una acérrima defensora de la biotecnología y así lo muestra en las respuestas proporcionadas en la entrevista.
Según Christiane Nüsslein-Volhard, las personas no son conscientes de lo que comen, ya que en cierto modo todas las plantas con las que nos abastecemos han sufrido una modificación genética. Muchos cultivos con los que nos alimentamos se han modificado genéticamente a lo largo de generaciones para poderlos adaptar a las necesidades humanas. Claro, que se trata de una modificación genética muy lenta, algo que pretende solventar la biotecnología reduciendo significativamente ese largo plazo de tiempo. ¿Cuál es la diferencia entre ambos tipos de modificación genética?, aunque la pregunta más oportuna sería ¿a qué tipo de modificación genética nos referimos?
No es lo mismo mejorar el aporte nutricional de una planta modificando sus propios genes, reorganizarlos, recombinarlos, etc., que introducir material genético de otra especie en esa planta, no existen estudios a largo plazo que muestren que esta combinación no pueda ser peligrosa, en cambio, las modificaciones genéticas que se han realizado a lo largo de cientos de generaciones son totalmente inocuas y sus valores han sido adquiridos poco a poco, no siendo una intromisión agresiva o incoherente.
La experta indica que la biotecnología ofrece numerosas ventajas a los agricultores y a los consumidores en general, pero volvemos al mismo tema, dependerá del tipo de modificación genética. Hay que mencionar a los transgénicos desarrollados por Monsanto en los que la modificación genética está sujeta a la productividad y la comercialización y no aportan mejores valores nutricionales o saludables. Recordemos que son alimentos desarrollados para soportar herbicidas como el Roundup, cuyo principal componente activo es el glifosato.
Christiane Nüsslein-Volhard parece tirar por tierra a la agricultura ecológica, indica que los alimentos que produce son comprados por los consumidores por sus inquietudes por preservar la naturaleza, obvia el sabor, el aroma y además la ausencia de productos químicos presentes en su composición. Bueno, en realidad sobre esta última cuestión parece insinuar que los agricultores ecológicos utilizan pesticidas para desarrollar sus productos. Ante estas insinuaciones, ¿de qué sirven los controles que se realizan sobre los cultivos ecológicos?, ¿la garantía ecológica de la Unión Europea es una farsa?, ¿tan pocos escrúpulos tienen los productores ecológicos?
En lo que sí coincidimos con la experta es en la imposibilidad de ofrecer actualmente productos de la agricultura ecológica a todo el mundo, el cambio climático y la llegada de nuevas enfermedades y plagas asociadas serían una de las principales razones, la alimentación biotecnológica será obligada. Según la bióloga, comprar productos ecológicos es una actitud de ricos, efectivamente así se podría considerar por los altos precios que presentan generalmente, pero no es una actitud de ricos, sino de respeto por el medio ambiente, por nuestro organismo y por el disfrute de comer alimentos con más cualidades organolépticas.
La biotecnología sólo es peligrosa dependiendo de las manos que la manejen, volvemos a poner como ejemplo a Monsanto y los problemas que han ocasionado algunos de sus productos, recordemos lo comentado en los post Se abandona la hormona bts, Berenjenas transgénicas, Los alimentos transgénicos pueden provocar infertilidad, etc.
Finalmente decir que Christiane Nüsslein-Volhard no aprueba a organizaciones como Greenpeace, ya que han entorpecido la labor científica con su ideología y actuaciones, incluso tacha el comportamiento de esta organización de inhumano con este ejemplo. “¡El comportamiento de Greenpeace es absolutamente inhumano! Ellos incluso ponen en peligro vidas humanas. Permítanme darles un ejemplo: hace unos años, los estadounidenses enviaron suministros de ayuda con maíz a los países africanos que tienen hambre. El maíz ha sido genéticamente modificado. Todo el mundo lo come en América (incluidos los turistas alemanes), pero los africanos mueren de hambre porque no se les permitía comer el maíz ya que Greenpeace y otros grupos advirtieron que había sido modificado genéticamente. Este tipo de absurdeces desafían a la comprensión. Y creo que es realmente deprimente.”
Recomendamos leer la entrevista en la página web de la Fundación Antama y digerirla con cordura, sería muy interesante y beneficioso que ambas posturas, la biotecnológica y la ecológica se acercaran, el resultado seguramente sería mucho más beneficioso.
Más información | Focus On Line (Entrevista original en Alemán)
4 comentarios
Estoy de acuerdo y en desacuerdo a la vez con los dos.
Comprendo que las palabras de Christiane no sean del todo acertadas, ya que ponerse en contra de la agricultura ecológica es algo que puede ir más allá de mis ideales, pero también entiendo que, aunque no se explique, quizás, con exactitud, la agricultura ecológica no siempre es la más natural. Me explico. Cuando dices: «[…]de qué sirven los controles que se realizan sobre los cultivos ecológicos?, ¿la garantía ecológica de la Unión Europea es una farsa?, ¿tan pocos escrúpulos tienen los productores ecológicos?», te puedo decir que esos controles sirven para controlar la utilización de pesticidas y demás productos contaminantes y/o nocivos para el medio ambiente, pero a su vez esas mismas leyes incluyen en sus normas unas cantidades mínimas de otros productos para combatir las enfermedades naturales que sufren los distintos productos alimenticios.
En resumen. Elige uno:
– Un vino procedente de viñedos tratados con pesticidas
– Un vino ecológico procedente de viñedos ecológicos tratados obligatoriamente con sustancias ‘naturales’ como el azufre.
– Un vino natural procedente de viñedos tratados sin productos químicos
El único que lleva sello de identidad es el segundo, también es el más caro, y sin embargo me quedo con el tercero: mejor sabor, ninguna resaca al día siguiente de beberte una botella tú solo y, aunque no porte el sello, más ecológico que ninguno.
Un saludo.
Javi, efectivamente son un poco desafortunadas las declaraciones, se puede defender la postura biotecnológica de muchas maneras y sin ofensa alguna. Con respecto a la naturalidad de la agricultura ecológica, efectivamente se incluyen en la reglamentación unos valores mínimos que son aceptados, es algo similar a lo que ocurriría con los productos ecológicos con contenido transgénico, la UE aprueba la inclusión de este material hasta en un 0,9% sin tener que informar a los consumidores.
La biotecnología es una gran herramienta, quizá pagan justos por pecadores, es decir, la mala reputación adquirida se debe a actuaciones como las protagonizadas por la empresa Monsanto. Entendemos que la investigadora defienda su postura y posiblemente tenga razón en muchas cuestiones, pero algunas razones se disipan cuando se inmiscuyen los intereses económicos o políticos prevaleciendo sobre los intereses saludables.
Con respecto al vino, «un vino natural procedente de viñedos tratados sin productos químicos», nosotros haríamos la misma elección pero ¿cómo sabes que este vino reúne esas características? Un sello de garantía que lo indique es la solución, pero un sello cuyo valor se sitúe en cero tratamientos de elementos químicos. No se deberían aceptar productos ecológicos con contenidos transgénicos o químicos, por mínimos que sean sus valores.
Nos gustaría recomendarte la lectura de los siguientes post con respecto al vino:
gastronomiaycia.republica.com/2008/03/31/todos-los-vinos-no-biologicos-podrian-contener-pesticidas/
gastronomiaycia.republica.com/2008/10/30/el-vino-esta-contaminado-en-casi-todo-el-mundo/
gastronomiaycia.republica.com/2008/02/21/vinos-ecologicos-una-industria-en-auge/
Un saludo.
No veo en la entrevista la agresividad de la que hablais y sí datos objetivos bien fundamentados… por cierto, todo lo contrario que el tercer párrafo del post basado en suposiciones y/o los prejuicios del autor.
En cuanto a la carga ideologica de los grupos ecologistas, Greenpeace es de los tibios, los más activos en España Ecologistas en Acción no esconden para nada su visión
«Forma parte del llamado ecologismo social, que entiende que los problemas medioambientales tienen su origen en un modelo de producción y consumo cada vez más globalizado, del que derivan también otros problemas sociales, y que hay que transformar si se quiere evitar la crisis ecológica.»
Entiendo pues la irritación de los científicos cuyo trabajo es puesto en cuestión de forma sistemática por este nuevo luddismo.
http://es.wikipedia.org/wiki/Ludismo
¿No se considera agresiva esta frase?, “¡El comportamiento de Greenpeace es absolutamente inhumano! Ellos incluso ponen en peligro vidas humanas.”, los datos pueden estar bien fundamentados como dices, pero en ellos se inmiscuyen otras razones que los enturbian.
Evidentemente a los científicos les debe resultar ofensivo que se descalifique su trabajo, pero como hemos mencionado en el post, todo depende de quién maneje la biotecnología y muchas de estas descalificaciones se han originado gracias a la actuación de empresas como Monsanto.
Nosotros descalificamos a Monsanto y la base para ello también la hemos mencionado en el post, sin embargo, creemos que el futuro está forzosamente en la biotecnología y compartimos algunas de las declaraciones de la experta. Por ello indicamos que sería interesante acercar posturas entre investigadores y ecologistas, dejando al margen a las empresas con pocos escrúpulos como puede ser Monsanto.
No creemos que se pueda aplicar el término ludismo a Greenpeace y sin embargo si se puede aplicar a nivel científico en algunos trabajos de Monsanto.
Saludos.