Ya hemos podido ver los primeros frutos que surgen de un árbol de la familia de las ebenáceas, el kaki, caqui o palosanto (Diospyros), que también se conoce como persimonio (persimon). Esta es una fruta de origen asiático de las que existen más de mil variedades, las diferencias se encuentran en la textura, en el sabor y en el color, pueden ir del amarillo, pasando por el naranja hasta el rojo.
El kaki o palosanto se cultiva actualmente en muchos países occidentales, Estados Unidos, España, Francia e Italia entre otros. Su temporada se inicia entre octubre y noviembre y se pueden disfrutar aproximadamente hasta el mes de marzo.
Este fruto tropical ofrece una textura gelatinosa en algunas variedades, similar a la mermelada, aunque el Persimon es tan consistente como puede ser una manzana. Su sabor es dulce con un regusto astringente debido a los taninos que contiene.
El kaki ofrece un valor nutritivo distinto dependiendo de la variedad de la que se hable, pero en general proporciona una alta proporción de hidratos de carbono (fructosa y glucosa) lo que hace de este fruto tropical sea más calórico que otras frutas. También proporciona proteínas, vitaminas A, C, B1 y B2, minerales (potasio, magnesio, fósforo, calcio y hierro) y fibra.
Las distintas variedades de kaki se clasifican por astringentes o no astringentes. En España disponemos de uno con Denominación de Origen de la Ribera del Xúquer (Valencia), se trata del caqui Rojo Brillante que pertenece a la variedad (CFA) de frutos astringentes.
Este tipo de kakis necesita un proceso de sobremaduración para poderlo consumir y con él se obtiene la variedad de caqui de pulpa dura Persimon, tan exquisito como los demás pero que se puede comer a mordiscos.
Los kakis son uno de esos alimentos que enganchan o que no quieres volver a ver, esto suele suceder cuando el regusto que deja al final en el paladar es desagradable, astringente y con una sensación pegajosa y rasposa en la lengua y en el cielo de la boca.
Si eres de los que aprecian este fruto tropical, puedes consumirlo tal cual o incluirlo en distintas elaboraciones. Generalmente se hacen postres deliciosos como helados, bizcochos, cremas, confituras, batidos… nosotros hacemos una gelatina de kaki estupenda. ¿Cómo los consumes tú?