Hoy hemos regresado del mercado con dos alimentos que os queremos mostrar porque no son muy habituales, el primero es la judía tierna que podéis ver en la fotografía, en la Comunidad Valenciana (y quizá en algunas regiones más) se conocen como Judía de manteca, en otras zonas sencillamente les llaman judías verdes amarillas, pues son unas judías verdes (Phaseolus vulgaris) que como se puede apreciar, tienen un tono de color crema o amarillo.
También se pueden encontrar estas vainas amarillas como judías Gold Marie (Beans Goldmarie) cuando se trata de la judía tierna plana, pues también hay judías de manteca de la variedad de vaina redondas, es la denominada Judía Rocquencourt, pero son más sabrosas las judías tiernas planas. El nombre de manteca se debe al color, no a la textura.
Como sabemos, las judías tiernas se consideran las vainas de las leguminosas inmaduras, igual que los guisantes. En ese momento ofrecen un sabor más fresco y dulce, las vainas aún no han transferido sus nutrientes a las semillas, que con el paso de los días engordarán y convertirán en moléculas de proteína y almidón. Aunque las vainas verdes sean recolectadas, siguen transfiriendo azúcares a las semillas, y pierden su dulzor, por eso no conviene guardarlas, sino comerlas cuanto antes tras su cosecha.
Seguramente en cada región de nuestro país serán más comunes unas u otras judías verdes, para nosotros las de color verde son las más habituales, seguidas de las judías moradas, rojas o pintas (con pinceladas moradas) y finalmente las judías de manteca o amarillas. Éstas las encontramos en muy pocas ocasiones, lo extraño es que en los gardens o viveros se ven a menudo, y parece ser que la producción de la judía de manteca no es floja.
Es una judía muy tierna, suave y cremosa en el paladar, muy agradable, aunque quizá, y según cómo se le proporcione la cocción, no es tan atractiva visualmente una vez cocinada, palidece más, ya os mostraremos alguna receta (si hacéis una crema de judías tiernas con esta variedad, más de un comensal no se esperará lo que contiene). También es importante destacar que el precio no difiere demasiado de las judías verdes que habitualmente encontramos rozando los 4 euros el kilo.
Seguramente muchos de vosotros ya conocíais las judías de manteca, nos gustaría saber dónde se cultivan y se consumen más y qué apreciación tienen en vuestro mercado.