Gracias al Blog de Gastronet encontramos un breve vídeo en el que escuchamos de boca de los grandes chefs, Juan Mari Arzak, Sergi Arola, Hilario Arbelaitz y Pedro Subijana, su opinión sobre la triste actuación de Santi Santamaría durante la entrega del Premio de Hoy por su libro La cocina al desnudo hace ya más de una semana.
Este tema tiene cuerda para tiempo, y no es de extrañar. Ya se ha hablado en todos los medios de comunicación sobre el arrebato del chef catalán, sobre las descalificaciones a sus compañeros de oficio, principalmente hacia Ferrán Adrià, sobre las alertas infundadas, sobre la falta de educación y profesionalidad frente a los medios, ha causado una tremenda indignación, que naturalmente, ha tenido respuesta.
Ya hemos visto en Gastronomía & Cía que hasta el Consejero de Agricultura, Alimentación y Acción Rural de Cataluña, Joaquim Llena, desaprueba su comportamiento, que Euro Toques condena sus declaraciones y las voces que se dejan oír, insisten en que no están bien las formas, aunque lo que argumente sea o no verdad.
Santi Santamaria ha creado un malestar bastante profundo entre los cocineros que aceptan la evolución y las nuevas tendencias en la cocina sencillamente porque les ha insultado y acusado de “envenenar” a sus comensales.
En fin, ya está casi todo dicho, sólo queríamos acercaros este vídeo.
3 comentarios
Fíjate que al entrar y ver el video, me ha interesado.
pero tras verlo…
sólo siento tristeza, porque se nota mal rollito y no me gusta.
Me enamora lo que hacen,sus obras, pero no quiero saber de sus «envidias», «faenas», y demás.
Pasa como con los escritores: no hacemos caso de sus miserias y sin embargo disfrutamos de sus expléndidas obras.
Bon apetit 😉
Lo de Ariola llamándole gordo…es tambien bochornoso.
eso, casi mejor cerrar la voz y si nuestro bolsillo lo permite, probar sus obras y disfrutar.
El Sr. Santamaria tiene mucha razón, pese a quien le pese .
La crítica no es bien admitida entre los adalides de la gastronomía de parque de atracciones, minibocado, deconstruido y de vaciado de bolsillo que practican nuestros más internacionales chefs. Las voces totalitarias rugen como lobos malheridos ante cualquier muestra de objeción o disidencia respecto de tanto neopapanatismo culinario, refugio de snobs e inapetentes. Positivo debate, sin duda.