Este mes han comenzado a comercializarse los Jamones Joselito Edición Premium y un lote formado por un lomo, un chorizo y un salchichón también de esta selecta edición, aunque nosotros nos vamos centrar en los jamones. Juan José Gómez “Joselito” vende sus jamones en las tiendas y restaurantes más exclusivos de muchos países, aunque su producción resulta bastante limitada y por ello la exportación no es significativa. Sin embargo, los beneficios son cuantiosos, basta con dar un vistazo al precio de sus jamones.
En el caso de esta nueva edición de Jamones Premium que ha empezado a comercializar, las piezas se presentan en unos estuches artesanales forrados con un material especial. El estuche es de diseño y conjuga los colores de la casa Joselito, un cierre imantado y unas correas para asegurar el jamón rematan un estuche de lujo para una pieza exclusiva con un valor de 3.000 euros.
Son jamones de pata fina que ofrecen unas características organolépticas especiales y únicas que lo convierten en un producto gourmet. Según la nota de cata, “Grasa entre dorada y rosácea de consistencia blanda y untuosa. Carne con variación de tonalidades desde rojo, con numerosas infiltraciones de grasa veteada brillante que se funde en el paladar. Su sabor es suave y delicado, ligeramente dulce en el ataque, sorprendiendo la untuosidad de su grasa fundiéndose en el paladar de forma sublime.” El proceso de curación de los jamones se prolonga durante 3 años y los ingredientes son el propio jamón y sal marina.
Se trata de un Jamón Gran Reserva que se considera el mejor jamón del mundo y una pieza genuina de la alta gastronomía alabada por los mejores chefs españoles, Ferrán Adrià, Martín Berasategui, Juan Mari Arzak o Santi Santamaría son algunos de ellos. Los consumidores de a pie podemos tener bastantes dificultades para poder adquirir uno de los jamones Joselito y no sólo por el precio, también por la falta de producto. Joselito sacrifica unos 30.000 cerdos al año y no da abasto, de hecho, hay lista de espera para adquirir uno de sus jamones.
La respuesta sería lógica, aumentar la producción, algo que no se hace porque para garantizar la misma calidad del jamón los responsables de la empresa indican que se debería aumentar el número de hectáreas de la dehesa y las encinas que en ellas se plantaran, tardarían unos 100 años en comenzar a dar bellotas, con lo que esta opción se descarta. La escasa producción, la tecnología que se aplica en todo el proceso de elaboración, la calidad que ofrecen las piezas y la exclusividad, garantizan que incluso en época de crisis todos los jamones de Joselito se vendan de forma instantánea.
Aunque la empresa se fundó en el siglo XIX, la expansión y la popularidad han sido fruto del trabajo de Juan José Gómez que ha sabido vender muy bien su producto. Para la mayoría de los consumidores es una delicatessen inalcanzable como muchos otros, y posiblemente coincidamos en que no nos gastaríamos ese dineral en un jamón Premium.
¿Crees que en nuestro país puede merecer un jamón este precio de venta?