Hace unos días, la cadena de supermercados Waitrose anunciaba que a partir del mes de marzo introduciría la prohibición de la venta de bebidas energéticas a los menores de 16 años, esto no ha gustado a la Asociación Británica de Bebidas Gaseosas, que comentó que estas bebidas se habían considerado seguras por las agencias reguladoras, además, no se promocionaban entre los menores de 16 años.
Hoy podemos saber que el famoso cocinero Jamie Oliver pide al Gobierno del país que se prohíba la venta de bebidas energéticas a los menores de 16 años, petición que también realizó a principios de diciembre del año pasado la organización Action on Sugar(AoS), denunciando que estas bebidas se comercializan a un precio muy económico y que uno de cada tres jóvenes del país las consume regularmente a pesar de tener un alto contenido en cafeína y azúcar. La organización comenta que, según una reciente investigación publicada en PLOS One, ciertas bebidas energéticas, se venden a niños y adolescentes menores de 16 años más baratas que el agua, algo a lo que se le debe poner freno, ya que están bien documentados los riesgos del consumo de este tipo de bebidas.
A estas peticiones hay que sumar la realizada por el sindicato de maestros NASUWT, que también pide al Gobierno del país que investigue y analice el impacto que tienen en la salud y en el comportamiento de los niños el consumo de estas bebidas. En la campaña que ha puesto en marcha Jamie Oliver, #NotForChildren, se apunta que el 69% de los niños de entre 10 y 18 años consumen bebidas energéticas (datos del estudio antes citado), y que el 13% de ellos admite que consumen alrededor de un litro o más en un mismo momento, lo que equivale a que un adulto se tome 12 cafés expresos de una sola vez, algo que resulta inadmisible. Esta es la nueva cruzada en la que se embarca el cocinero con el propósito de preservar la salud de los menores, recordemos que la última fue la de solicitar que se introdujera el impuesto de las bebidas azucaradas.
Son varias las razones que se apuntan para evitar el consumo de bebidas energéticas entre los menores, si hablamos de azúcar, una lata de este tipo de bebidas puede contener 27’5 gramos de azúcar, es decir, algo más del azúcar máximo recomendado por la OMS sobre el consumo diario, recordemos que se apunta que algunos niños llegan a consumir un litro diario. Cierto es lo que comentan las empresas que se dedican a la elaboración de este tipo de bebidas, en los envases aparece el mensaje de que no se recomiendan a los niños, pero esto no es suficiente y es un mensaje ignorado. Por otro lado, los niños son persuadidos para su consumo a través de mensajes de marketing en los que se afirma que son bebidas que ayudan a tener energía, que son ideales para quienes realizan deporte y que favorecen el rendimiento mental.
Algunas escuelas mantienen su propia lucha contra este tipo de bebidas y las prohíben en las instalaciones escolares, pero esto tampoco es suficiente, Jamie Oliver considera que es necesario que el Gobierno restrinja legalmente la edad para la venta de bebidas energéticas, por ello, comenta que inicia una nueva revolución contra las bebidas energéticas con el cometido de proteger a los niños de los dañinos niveles de azúcar y cafeína que contienen estos productos. El chef solicita a todas las personas que se impliquen y a través de redes sociales, como Twitter, secunden la petición al Secretario de Salud del Reino Unido, Jeremy Hunt, solicitándole la prohibición de la venta de bebidas energéticas a los menores de 16 años utilizando el hashtag #NotForChildren.
Varias investigaciones han apuntado diferentes consecuencias del consumo de bebidas energéticas, aumento de la presión arterial y el estrés, problemas en la salud mental, problemas de sueño, variaciones en el estado de ánimo, caries, cambios significativos en las funciones del corazón y alteraciones en la presión sanguínea, e incluso tendencias suicidas, algo que señalábamos aquí. Son muchos estudios los que se han realizado y las conclusiones no se pueden ignorar, en el Reino Unido se ha iniciado una cruzada contra este tipo de bebidas, en otros países (pocos) han prohibido su venta a menores de 18 años, quizá es necesario secundar esta campaña y elevar la petición a los gobiernos de otros países.
Podéis conocer todos los detalles de la nueva campaña de Jamie Oliver a través de este artículo en su página oficial.
Foto 2 | Au Kirk