Combinar en un bocado patata, huevo y trufa es un éxito asegurado, y lo mejor es que hay infinidad de formas de preparar un plato con estos tres ingredientes, dos básicos de nuestra alimentación y uno considerado gourmet, pero que en algunos formatos es fácil de conseguir, aunque la mejor es la versión fresca, como en todo. El caso es que la receta de patatas, huevo y trufa de hoy nos llega de la mano de Miquel, que comparte la elaboración en vuestra sección Hoy Cocinas Tu, veréis que es una forma curiosa de presentarlo, muy recomendable para sorprender a vuestros invitados en una comida o cena especial.
Como podéis ver en la foto, se trata de un Potito de patatas, huevo y trufa, se sirve y se come en el mismo tarro, y parcialmente se cocina en el mismo recipiente. El autor del blog Les Receptes del Miquel os explica el paso a paso a continuación, es muy sencillo, aunque requerirá su tiempo. Por cierto, para hacer esta receta es necesario disponer de dos botes de vidrio con su tapa hermética (la receta es para dos personas), en caso de querer hacer para más comensales, simplemente habrá que aumentar proporcionalmente todos los ingredientes, y también los tarros, claro.
Ingredientes (Para 2 potitos)
- 1 patata pequeña para freír (unos 80 gramos)
- trufa fresca (o pasta trufada o trufa en su jugo pero de buena calidad)
- aceite de trufa
- sal.
Para el puré de patatas
- 1 patata especial para cocer (unos 180 gramos)
- 30 gramos de puerro
- 20 gramos de mantequilla
- sal.
Elaboración
Primero hacemos el puré y si podemos hacerlo un rato antes para que se enfrié mejor. Pelamos la patata de cocer, la cascamos (cortar rompiéndola) y la ponemos en un cazo con agua hirviendo. Añadimos el puerro picado y la mantequilla. Salpimentamos y dejamos cocer a fuego medio durante unos 20 minutos. Una vez todo cocido, sacamos la patata y la ponemos dentro de un vaso batidor, añadimos algo de su agua de cocción y trituramos. Añadimos más agua si hace falta y trituramos hasta que tenga la textura de puré.
Cortamos la patata de freír en rodajas muy finas, las pasamos por agua y las secamos bien. Las freímos en abundante aceite de oliva. Una vez fritas, las retiramos sobre papel de cocina absorbente. Estas patatas las tenemos que hacer justo antes de montar el potito, pues han de quedar crujientes.
Ponemos el puré de patatas y puerro en el fondo del tarro de vidrio. Cortamos bruscamente las patatas fritas y las añadimos encima. Salamos ligeramente. Incorporamos el huevo, con cuidado para que no se rompa la yema. Salamos (si tenemos sal de trufa mejor), añadimos la trufa fresca rallada, o la de bote picada, o la pasta de trufa. Y ponemos un chorrito de aceite de trufa.
Tapamos y cocemos al baño María durante 14 minutos a 85º C. Si no tenéis termómetro, debéis dejarlo en el punto justo antes de que rompa a hervir. La clara quedará prácticamente hecha y la yema líquida.
Acabado y presentación
Servimos inmediatamente y dejamos que cada uno destape su potito, quedaremos sorprendidos por el olor a trufa. Antes de comerlo, mezclamos todo y a disfrutar.
Miquel
Les Receptes del Miquel
