Nos encanta la combinación del queso con los frutos secos, aunque habréis percibido en nuestras recetas que los frutos secos nos encantan combinados con muchos otros alimentos, pero realmente con el queso hacen una buena armonía, y la que nos propone el autor del blog Les Receptes del Miquel con la receta que comparte en vuestra sección Hoy Cocinas Tú nos parece ideal, un contraste de sabores que estamos seguros de que nos va a encantar. La receta son unas Patatas confitadas al Cabrales con praliné de avellanas.
Y es que el sabor fuerte y saladito que tiene este queso con el sabor característico de la avellana sumado al toque dulzón de su presentación en praliné, tiene que ser un éxito asegurado. La suavidad de la patata puede ser también la base ideal para este pequeño bocado que se presenta como aperitivo. Si opináis lo mismo, tomad nota de la receta a continuación. Miquel comenta que de salsa de Cabrales sobrará, pero en la nevera aguanta una semana y sirve para tomar sobre un trozo de pan tostado por ejemplo. Y sobre el praliné, ya sabéis que aguanta bastante más, así que ya que os ponéis podéis hacer más cantidad y tener para otras recetas, o para repetir estas patatas al Cabrales.
Ingredientes (4 personas)
- 12 mini patatas de un tamaño similar (yo he usado las que vienen ya preparadas para hacer al microondas).
Para el praliné de avellanas
- 100 gramos de avellanas peladas y tostadas
- 60 gramos de azúcar
- 15 ml. de agua mineral
- 1/4 de vaina de vainilla.
Para la salsa de Cabrales
- 25-40 gramos de queso Cabrales (si os gusta poco el Cabrales poner sólo 25 gr y si os gusta mucho poner 40)
- 100 ml. de nata de montar
- 100-150 gramos de queso Mascarpone o queso graso Philadelphia.
Para decorar
- Cebollino u hojas de perejil.
Elaboración
Para el praliné de avellanas
El praliné lo podemos preparar días antes y lo podemos guardar en la nevera varios meses. Colocar las avellanas tostadas en la bandeja del horno y tostar ligeramente a 150 grados centígrados durante 15 minutos, removiendo de vez en cuando para que no se quemen. Retirar del horno. Si son crudas será necesario el doble de tiempo o más).
En un cazo o sartén antiadherente poner el azúcar, el agua y la vainilla abierta y sin remover dejar hervir hasta que empiece a tomar color de caramelo. En ese momento añadir las avellanas y remover bien para que se impregnen por todos lados. Veremos que el azúcar se cristaliza, es normal, seguiremos removiendo hasta que se convierta en caramelo.
Retirar la vaina de vainilla, verter sobre una bandeja cubierta con papel vegetal, extender bien y dejar enfriar. Una vez frío romper con las manos en trozos pequeños y colocar en un molinillo, Thermomix o pequeño electrodoméstico que tengamos y que triture. Veremos que primero se convierte en polvo, pero si seguimos triturando la avellana empieza a expulsar el aceite y se transforma en una pasta. Guardar en un recipiente hermético en la nevera.
Para la salsa de Cabrales
Poner la nata en un cazo al fuego a calentar, cortar el queso Cabrales en trocitos pequeños y añadir a la nata, remover hasta que se ha fundido el queso. Triturar con una batidora de mano y pasar por un colador fino de malla. Poner de nuevo al fuego y dejar reducir 2 minutos a temmperatura suave y removiendo. Sacar del fuego, dejar que pierda un poco de tempertura durante unos 5 minutos y añadir el queso mascarpone (poner primero sólo 100 gramos y probar la textura, al enfriar luego en la nevera será más espesa esta crema, como el queso mascarpone, y el gusto, y si hace falta poner más queso), mezclar todo bien con unas varillas y pasar a una manga pastelera con boquilla lisa o rizada. Reservar en la nevera hasta el momento de utilizar, aunque conviene sacarla un poco antes para que se atempere y no esté tan fría y dura.
Para confitar las patatas primero las lavarlas bien y secar. Con una cuchara parisien pequeña, o con un cuchillo o un descorazonador de fruta, hacer un hueco central hasta llegar a la mitad de la patata y un poco más. Por la parte contraria cortar una pequeña base recta para que las patatas se mantengan en pie al presentarlas. Calentar el aceite en un cazo o en la freidora a unos 90 grados (de esta manera controlaremos mejor la temperatura) y cuando esté a la temperatura deseada, colocar las patatas y dejar confitar sobre unos 60-90 minutos (yo las he tenido en 70 minutos), dependerá del tamaño de las patatas y de la clase. Para saber si ya están confitadas pinchar con la punta de un cuchillo o palillo y si entra fácilmente ya estarán hechas. Cuando las patatas estén confitadas, con cuidado retirar del aceite, escurrir sobre papel de cocina.
Acabado y presentación
Colocar las patatas confitadas en el plato de servir. Rellenar el hueco central con el praliné y cubrir con la salsa de Cabrales. Para terminar, decorar al gusto.
Miquel
Les Receptes del Miquel