María Beatriz y Helmut del blog Amantes de la Cocina, nos han enviado su receta de Cheescake de maracuyá y nos cuentan que es uno de los postres más populares y que más gustan en Venezuela, aunque como bien sabemos, no es una tarta tradicional del país. Cuentan que fueron algunos cocineros franceses los que se encargaron de adaptar el famoso mousse de chocolate a los gustos y sabores tropicales, preparándolo con frutas caribeñas como la guanábana o la parchita. Esta última también se conoce como chinola, granadilla, maracuyá o maracujá, parcha o fruta de la pasión.
A continuación podéis ver un vídeo en el que nos muestran cómo hacer esta Cheesecake o Tarta de queso y maracuyá, además de leer el paso a paso de la receta. Es muy fácil de elaborar, así que no tenemos excusa para probarla en cuanto tengamos la fruta.
Ingredientes (Molde 22 cm.)
Para la base
- 30 galletas tipo María
- 125 gramos de mantequilla derretida.
Para el relleno
- 500 gramos de queso Quark tipo alemán (o queso crema tipo Philadelphia, preferiblemente bajo en grasas)
- 250 ml. de pulpa de maracuyá
- 150 gramos de azúcar
- 6 láminas de gelatina sin sabor o 2 cucharadas soperas de gelatina en polvo
- 200 ml. de nata líquida para montar.
Para la cobertura
- 2 láminas de gelatina sin sabor o 1 cucharadita de gelatina en polvo
- 125 ml. de pulpa de maracuyá
- 2 c/s de azúcar.
Elaboración
Para la base
Con la ayuda de una picadora tritura las galletas. También puedes meter las galletas en una bolsa de plástico para conservar alimentos, cerrarla bien y pasar un rodillo por encima hasta que veas que las galletas están hechas migas. Derrite la mantequilla en el microondas y mézclala con las gallegas picadas en un recipiente.
Ahora vamos a utilizar el molde al revés, es decir, con lo de arriba para abajo. De esta manera será más fácil desmoldar el cheesecake. Coloca el molde en el centro de un pedazo de papel antiadherente para horno, cuida de que el papel sea unos 4-5 cm. más grande que el molde. Comienza a torcer y a curvar el papel alrededor del molde, trata de hacerlo bien apretado y ajustado. Cuando llegues al final, deja un pedacito un poquito más largo y lo pegas con cinta adhesiva. Aquí te dejamos nuestro vídeo para que veas como lo hacemos.
Vierte dentro del molde la mezcla de galletas y con la ayuda de la base de un vaso, aplasta de manera que cubras uniformemente todo el fondo. En este caso no necesitaremos cubrir las paredes del molde. Reserva.
Para el relleno
Remoja las láminas de gelatina en agua fría hasta que esponjen y ablanden. Mientras tanto, en una ollita calienta la pulpa de maracuyá o parchita, no dejes que hierva. Retira del fuego y pasa el líquido por un colador para extraer todas las semillas y devuelves el líquido a la ollita. Agrega el azúcar al jugo o zumo caliente y espera a que se disuelva.
Exprime la gelatina, la añades, revuelves y esperas a que se diluya completamente (utiliza la gelatina sin sabor que tengas a mano y revisa las instrucciones del paquete. Debes utilizar la cantidad necesaria para gelificar aprox. 750 ml.). Recuerda que es importante que la gelatina no hierva. Reserva y espera a que se enfríe un poco.
Monta la nata líquida con ayuda de las varillas eléctricas. En otro recipiente, remueve con un batidor de mano, el queso Quark o el queso crema tipo Philadelphia hasta que esté libre de grumos. Agrega parte del queso a la gelatina para atemperar la mezcla. Esto es importante, ya que si se agrega la gelatina caliente a la mezcla, ésta se endurece de inmediato y la masa no quedará homogénea. Añade el resto del queso y mezcla bien cuidando que todo quede bien integrado.
Con la ayuda de una espátula, agrega en varias tandas la nata montada y mezcla con movimientos envolventes. Debe quedar una masa homogénea y brillante. Vierte la mezcla en el molde, encima de la base de galletas y esparce bien. Dale unos golpecitos contra la encimera de la cocina para que no queden burbujas de aire en la masa.
Lleva la tarta a la nevera para reposar entre 4 y 6 horas para que se endurezca. Nosotros normalmente preparamos este cheesecake de un día para el otro.
Para la cobertura
Remoja las láminas de gelatina en agua fría hasta que esponjen y ablanden.
En una olla calienta la pulpa de maracuyá, esta vez no hay que colar las semillas. Agrega el azúcar, y cuando esté disuelto retira del fuego y añade la gelatina, remueve bien para que se disuelva completamente. Reserva y espera a que se enfríe un poco antes de colocarla sobre el cheesecake. Cuando esté atemperada y aún líquida, agrégala, nivela la superficie y distribuye las semillas para que queden bien repartidas.
Deja reposar en la nevera por una hora o hasta que se endurezca.
¡Sirve y deléitate con su sabor caribeño!
María Beatriz y Helmut
Amantes de la Cocina