Zero G Kitchens es una empresa que ha fabricado el primer prototipo de un horno para cocinar galletas en el espacio, se trata de un pequeño electrodoméstico que podrá realizar la cocción de pequeños alimentos, con el que se espera hacer más llevadera la vida de los astronautas en el espacio. En este proyecto se han asociado Zero G Kitchens, la cadena hotelera DoubleTree Hotels y NanoRacks, una compañía comercial que opera en la Estación Espacial Internacional (ISS) y que es conocida por la creación de prototipos, tecnología PnP (Plug and play) y otros procesos y productos relacionados para transbordadores espaciales y estaciones espaciales de la NASA.
Los planes son enviar el prototipo de horno a finales de este año a la Estación Espacial Internacional y hornear una masa de galletas proporcionada por DoubleTree. Ian Fichtenbaum y su esposa Joana, fundadores de la empresa Zero G Kitchens, comentan que la ISS tiene una disponibilidad muy limitada para preparar alimentos en la forma en la que los seres humanos estamos acostumbrados, claro, que poder hornear un alimento en el espacio es, hasta el momento, un tema complicado debido a la falta de gravedad, pero parece que con el nuevo prototipo de horno será posible.
Los fundadores de la empresa aseguran que para traspasar la frontera del espacio es necesario tener acceso a una vida más cotidiana, quizá pudiendo hacer algo tan simple como poder hornear una galleta y comérsela. Según comenta Ian Fichtenbaum, cuando desarrollaron el prototipo de horno pensaron en DoubleTree by Hilton y su característica galleta, ya que esta cadena es conocida por sus cookies con pepitas de chocolate que preparan para recibir a los huéspedes de sus hoteles.
Pero, en nuestra opinión, utilizar unas galletas, o mejor dicho una masa de galletas de la cadena hotelera, parece algo forzado que puede tener que ver con su participación económica en el proyecto. También es verdad que los inversores son necesarios y si con ello logran su objetivo, pues bienvenida sea la masa de galletas de la cadena hotelera. Buscando en la historia de esta cadena hotelera, podemos saber que ya en 1958 fue pionera al concebir la idea de un “hotel lunar”, lo que muestra que sus responsables han tenido visión de futuro e interés por la carrera espacial y los negocios que a ella se puedan asociar. Sobre el sentido de la galleta, como ya hemos comentado, representa un gesto de bienvenida para los huéspedes, por lo que hornearla en el espacio es un modo de compartir ese momento hospitalario a mayor escala.
El horno fue construido en 2018 y se esperaba poder enviarlo a principios de este año a la ISS, pero, como vemos, se ha retrasado hasta finales de año. Los responsables de su desarrollo comentan que su cometido es ayudar a los investigadores y empresas a la hora de crear un entorno y una vida más cotidiana en los vuelos y las futuras misiones espaciales, por ello tienen en mente otros proyectos relacionados con el mundo de la cocina.
El horno para cocinar en el espacio es diferente a los hornos convencionales, tiene forma cilíndrica y se ha diseñado para poder contener y hornear alimentos en un entorno de microgravedad, se podrán colocar los productos para una cocción a una temperatura máxima de 180º C, sin riesgo a que los productos a hornear se muevan gracias a una bandeja especial fabricada en silicona. El aparato cuenta con mecanismos de aislamiento y ventilación que permiten que funcione de manera segura en el entorno controlado de la Estación Espacial Internacional, hay que decir que el prototipo ha superado todas las revisiones de seguridad de la NASA.
En estos últimos años hemos conocido diferentes proyectos relacionados con la comida y la bebida en el espacio, por ejemplo, la investigación para el cultivo de patatas en Marte, la del botánico y ecologista Wieger Wamelink para cultivar rábanos, tomates, guisantes y centeno en suelo lunar y marciano, el desarrollo de una cafetera para preparar café expreso en condiciones de gravedad cero, o envases especiales como una nueva botella para beber cerveza en el espacio del mismo modo que se bebería en la Tierra, entre otros.
Poco a poco se suman nuevos productos y tecnologías relacionadas con la comida y la bebida a la carrera espacial, ahora tendremos que esperar a final de año (si es que no se retrasa otra vez) para ver si el horno espacial logra hornear la galleta y el resultado es similar al de una galleta horneada en la Tierra. A través de la página oficial de Zero G Kitchens podréis conocer más detalles del proyecto.