Nunca pensamos que volveríamos a conocer una noticia de Heston Blumenthal relacionada con una intoxicación alimentaria en su restaurante, pero así ha sido, Heston Blumenthal cierra el Restaurante Dinner por un brote de norovirus. En 2009 la noticia fue muy sonada, y también fue en el mes de febrero, el chef británico tuvo que cerrar The Fat Duck tras la alarma de indisposición de sus clientes, en principio se hablaba de unos 40, pero la cifra de afectados ascendió a unos 400 casos, personas que estaban sufriendo los malestares propios de una intoxicación alimentaria, después de haber comido en el que entonces era el segundo mejor restaurante del mundo.
El restaurante triestrellado de Bray (en el condado inglés de Berkshire), estuvo cerrado durante dos semanas, después de realizar todas las investigaciones y análisis posibles para hallar el foco de la intoxicación, y asegurarse de que el restaurante estaba limpio. Todavía hay varios argumentos sobre qué o quién provocó la intoxicación.
En la misma situación se encontró el año pasado René Redzepi, en el mes de marzo saltó la noticia de la intoxicación en el Restaurante Noma provocada por el norovirus. En este caso, el que en ese momento era el número uno en la Lista de los 50 Mejores Restaurantes del Mundo, parece que provocó la intoxicación alimentaria a menos de un centenar de comensales, siendo el posible causante un miembro del equipo de cocina de Noma.
Se repite la historia con Heston Blumenthal, pero en su restaurante de londinense Dinner (en el Hotel Mandarin Oriental de Hyde Park), reconocido con dos estrellas Michelin. Según leemos aquí, hace dos semanas que un cliente informó del malestar que padeció tras comer en el restaurante, mostrando los síntomas que provoca el norovirus. Tras ponerlo en conocimiento del equipo de salud ambiental del Consejo de Wetminster, se empezaron a registrar nuevos casos.
Hoy, día 2 de febrero, desde la web del hotel han informado del cierre de Dinner by Heston Blumenthal durante un periodo aproximado de una semana. Quienes tuvieran mesa reservada para esta semana, deberán contactar con el hotel para obtener más información y solventar su cita.
En esta ocasión, la intoxicación ha afectado a 24 clientes y a 21 empleados del restaurante de Heston Blumenthal, según la información que se ha hecho pública, y parece ser que ya se conocen los resultados de los análisis realizados, la causa es el virus estomacal con más prevalencia en Reino Unido, pudiendo ser transmitido por personas infectadas que no realizan una buena higiene de sus manos, por las superficies de la cocina, por los utensilios…
El chef ha pedido disculpas a las personas afectadas (cuánto menos) y por las molestias que provoque a los clientes que han visto cancelada su reserva. Ha explicado también que como siempre, va a errar por tomar precauciones hasta el extremo para evitar que esto vuelva a suceder. Claro, el problema no está sólo en sus manos, con tantos empleados y productos susceptibles a la contaminación viral, no hay una persona que pueda controlarlo, debe ser una labor de todos.
Por eso, el equipo de seguridad alimentaria del Ayuntamiento de Bestminster, ha instado al restaurante a mejorar algunos de sus procedimientos de higiene, incluyendo aleccionar al personal sobre su conducta higiénica en el establecimiento, y al parecer, todos los procedimientos se realizaron de forma inmediata. En cualquier caso, la noticia no deja de sorprendernos…
Foto | David Levene
2 comentarios
Resulta sospechoso que un buen restaurante sufra estas contaminaciones. No ocurre con restaurantes menos lujusos. Uno tiende a pensar en un boicot.
santaklaus: ¿ya estamos imaginando conspiraciones? Sencillamente, le ha ocurrido lo de su restaurante Noma, con intoxicaciones por el mismo norovirus. Si no es más que un virus muy corriente en UK, como se dice en la noticia, puede que se deba simplemente a falta de higiene de alguien y no a alimentos ya contaminados como los moluscos. Ah! una cosa tan simple y barata como la lejía (con un «chorrito pequeñito» por litro de agua es suficiente) mata virus y bacterias, y lavando con ello las manos, encimeras y utensilios de cocina, se evitan problemas como éste. Muy sencillo.