Ya está en marcha el proyecto de construcción de la primera granja para la crianza de atún rojo en Cádiz, se trata del primer centro que se construirá en breve en el muelle de El Puerto de Santa María después de que la empresa responsable del proyecto haya logrado obtener los permisos correspondientes tras dos años de espera. Recordemos que en marzo de 2008 hablábamos sobre el proyecto en el post Se podría garantizar el abastecimiento mundial del atún rojo desde Cádiz.
Como ya indicábamos en su momento, no es la primera granja de atún, ya que en otros países podemos encontrar este tipo de granjas pero orientadas a otras especies diferentes, por lo que sí es la primera granja para criar atún rojo del mundo. La noticia y la puesta en marcha de la granja no podía haber sido más oportuna, recordemos que la demanda del atún rojo ha puesto contra las cuerdas a la especie y el peligro de extinción planea sobre ella desde hace algunos años.
Los continuos intentos para preservar la especie y evitar la comercialización internacional no han servido hasta el momento de mucho, recordemos que ayer se iniciaba la reunión de la CITES (Convención sobre el comercio internacional de especies amenazadas de fauna y flora silvestres) en Doha (Qatar), reunión que concluirá el próximo 25 de marzo y en la que se tratarán distintos temas, además de intentar acordar la prohibición del comercio internacional de atún rojo (tema principal de esta reunión), se hablará de la pesca de tiburones y de la codiciada aleta de tiburón, así como de la conservación de otras especies que corren el peligro de extinción.
El caso es que sería interesante plantear en la reunión de la CITES la puesta en marcha de la granja para la crianza de atún rojo en Cádiz para que la balanza se inclinase a favor de la protección de la especie, y prohibir su pesca y comercialización hasta que pueda recuperarse. Recordemos que la empresa danesa Futuna Blue garantizaba que se podrán abastecer con 500.000 ejemplares de atún rojo anuales que serían criados hasta alcanzar los 50 gramos de peso, posteriormente se enviarían a las granjas de acuicultura presentes en la cuenca del mediterráneo para terminar su engorde.
El futuro del atún rojo depende de la citada prohibición y de proyectos como el de la sociedad danesa Futuna Blue, a través de EPA podemos saber que la granja de atún rojo ocupará una superficie de 27.000 metros cuadrados (inicialmente se hablaba de 30.000 metros cuadrados) y contará con la tecnología más avanzada para lograr que una especie salvaje como el atún rojo pueda desarrollarse en cautividad y alimentado con piensos elaborados a partir del pescado forraje, especies marinas de poco valor comercial con las que se elaboran aceites y piensos para la alimentación animal.
Con este proyecto de acuicultura se reduce la presión que existe sobre la población de atunes rojos y si todo se desarrolla según lo previsto, podrían desarrollarse otras granjas de atún rojo que mejorarían la situación. En El futuro del sushi en peligro, mostrábamos que la pasión por esta elaboración culinaria es internacional y que es en parte responsable de la situación actual del atún. El país que va a mostrar una fuerte oposición a la prohibición de la prohibición del comercio internacional de atún rojo será Japón, es difícil saber si proyectos como las granjas de atún rojo de Futuna Blue lograrán hacer que este país sea más receptivo y contribuya a preservar la especie respaldando la prohibición.
En todo caso, la granja para la crianza de atún rojo en Cádiz es una buena noticia, ahora sólo resta esperar que se ofrezcan las correspondientes ayudas para no dejar al sector desprotegido.
Foto 1 | Stu Spivack
Foto 2 | Brightsea