Cuando cocinamos en casa, uno de los mayores placeres es pasar el dedo por lo que ha quedado en el cuenco para chuparlo, hablamos por ejemplo cuando hacemos una crema de vainilla o de chocolate para una tarta, o para los más salados, cuando se prepara una salsa de queso, por ejemplo. En estos casos la espátula maryse o lengua no es el mejor amigo del cocinero porque le priva de este privilegio del cocinero. Algo parecido ocurre también en la mesa, no hace falta cocinar para disfrutar la comida con las manos, después de comer unas alitas de pollo, para la mayoría es un placer chuparse los dedos.
Diversos estudios se han enfocado para descubrir la percepción que se tiene de los alimentos según en qué recipiente se sirven, de qué color es la taza o el plato, con qué cubierto se toma, su material… un ejemplo lo veíamos en esta investigación que concluía que el color de la taza influye en la percepción del sabor del café, pero sólo es un ejemplo, al final todo influye en la percepción que tenemos de los alimentos que consumimos.
Por eso, el psicólogo experimental Charles Michel y el diseñador Andreas Fabian han creado una nueva cuchara, se llama Goûte, y pretende emular la forma de un dedo, no es una cuchara para comer sopa ni nada por el estilo, pretende ser un utensilio que proporcione el mismo placer que se siente al chuparse los dedos, pero sin necesidad de utilizarlos, algo que no estaría bien visto en establecimientos públicos o cuando se está rodeado de otras personas, aunque sea en casa.
‘Goûte, chúpate los dedos’, es el nombre y eslogan de este cubierto de Michel / Fabian, quienes lo presentan argumentando lo que antes comentábamos, ‘algunas de nuestras deliciosas e inolvidables experiencias con la comida a menudo provienen de comer sin cubiertos. Comer con las manos desnudas, chupando los dedos o incluso lamiendo un plato son comportamientos naturales’. Con ello también ponen en el mercado un objeto para evocar la experiencia sensual de lamer los dedos de una manera elegante, declaran.
Por eso se propusieron crear un cubierto que hiciera más placentera la experiencia de comer alimentos cremosos como un yogur, una mousse de chocolate, un porridge, el hummus, etc. Al parecer hicieron varios bocetos, y al final el diseño de cuchara que podéis ver en las fotos, una especie de ‘dedo’ de vidrio que se fabrica a mano. Mide 21 centímetros de largo y unos 2 centímetros de grueso en el extremo más grueso, aunque al ser piezas artesanas el tamaño puede variar.
Pero no es esta la única cuchara con forma de dedo que han lanzado, la madera también es un material que a muchos nos gusta para comer, por lo que Goûte también está disponible en varios tipos de madera, como la de olivo, de peral o de arce, siendo además ideal para utilizar con la miel. El precio cambia según el material que se elija, mientras que la Goûte de vidrio cuesta unos 34 euros, la de madera puede adquirirse a partir de los 22 euros aproximadamente.
En la web de esta nueva cuchara podéis conocer más detalles sobre su diseño y las propiedades que le otorgan, cuentan que en 2015 se realizó un experimento en colaboración con el Laboratorio de Investigación sensorial de la Universidad de Oxford para probar la percepción del sabor que tenían los catadores utilizando Goûte, y parece ser que éstos aseguraron que la percepción era mejor que con una cuchara normal, como ejemplo indican que el yogur se percibió más dulce con Goûte que con una cuchara de plástico.
¿Qué os parece a vosotros? Personalmente debemos confesar que a primera vista sí nos parece que debe proporcionar una sensación agradable comer con este nuevo cubierto, pero al final no resultará práctico, al menos no tanto como un dedo de nuestra mano, pues cuando estemos terminando de comer el yogur o una mousse de chocolate, seguro que el recipiente no se puede apurar igual con Goûte, y en casa acabaremos metiendo el dedo. ¿Y cómo se cogen las fresas del yogur?
Fotos | Joe Sarah