Estas Galletas de avena, quinoa, chocolate y cacahuete os van a sorprender en cuanto las probéis, no son unas galletas clásicas, no llevan harina, ni mantequilla, ni azúcar… son unas galletas muy particulares, y lo mejor de todo es que son saludables, que están deliciosas y que son muy fáciles de hacer, así que os invitamos a que toméis nota de la receta paso a paso a continuación.
Un detalle muy importante de esta receta de galletas saludables es que no necesitan horno, así que, además, serán ideales para las próximas semanas, cuando no apetezca encender el horno pero sigamos con ganas de comer unas galletas de chocolate en el desayuno o en la merienda, ahora bien, que no se os ocurra mojar en la leche que se derriten.
Pues vamos con la elaboración paso a paso de estas Galletas de avena, quinoa, chocolate y cacahuete, están deliciosas, son saludables y no necesitan horno, y son tan fáciles, que las podréis hacer en familia, y con los niños, en un ratito cualquier tarde de estas. Es como hacer unas rocas de chocolate, sólo hay que fundir un buen chocolate con un elevado porcentaje de cacao, mezclarlo con el resto de los ingredientes y darle forma.
Ingredientes
- 180 gramos de chocolate para fundir (mínimo 72% cacao)
- 100 gramos de manteca de cacahuete con trocitos (100% cacahuete)
- 12 gramos de aceite de coco
- unas gotas de extracto de vainilla
- 100 gramos de copos de avena integral
- 20 gramos de quinoa inflada.
Elaboración
Pon en un bol apto para microondas el chocolate troceado en trozos más o menos iguales para que se funda de manera homogénea. Introduce el bol en el microondas y programa 1 minuto a 800 vatios.
Incorpora la manteca o crema de cacahuetes crujiente y el aceite de coco, vuelve a introducir el bol en el microondas durante 1 minuto a 800 vatios. Para terminar de fundir e integrar los tres ingredientes, bate con una espátula, estará listo cuando obtengas una crema fina y homogénea.
Añade el extracto de vainilla, los copos de avena integral y la quinoa inflada, mezcla bien y extiende la preparación sobre papel vegetal. Después deja que se enfríe un poco y marca las galletas con un cortapastas.
También puedes hacer las galletas con una cuchara de helados, cociendo porciones y aplanándolas con el dorso de la misma, o haciendo quenelles con dos cucharas, e igualmente aplanándolas, no conviene que sean muy gruesas estas galletas, aunque no quedan duras.
Para que se enfríen más rápido, deja reposar las galletas crujientes en el frigorífico.
Acabado y presentación
Cuando las galletas de avena, quinoa y cacahuetes estén frías, estarán crujientes y listas para guardar. Según la temperatura que tengas en la despensa o en la cocina, convendrá guardarlas en la nevera. Después, se pueden comer directamente o dejarlas un rato a temperatura ambiente, el sabor del buen chocolate y el resto de ingredientes se apreciará mejor. ¡Buen provecho!
