Queremos compartir con vosotros esta receta de Galletas de almendra y queso crema, os van a encantar y además, van a ser apropiadas para personas con ciertas restricciones alimentarias, concretamente para quienes no pueden tomar huevo, pues no está entre sus ingredientes. Es una receta muy simple pero el resultado es excelente, son unas galletas de sabor suave, crujientes por fuera y algo tiernas por dentro, pero con una textura hojaldrada que os va a gustar.
Además pueden ser unas galletas bastante ligeras, pues llevan poca mantequilla y el queso crema que se utilice puede ser bajo en grasa o light. Estas galletas de queso y almendra también llevan poco azúcar, nos gusta utilizar el que aromatizamos con vainilla, pero directamente con la vaina de vainilla que trituramos con sus semillas antes de mezclarlo con el azúcar (también se podría triturar junto, entonces se obtendría un azúcar más fino, como un azúcar glas. Tomad nota de la receta y probadla pronto, porque os va a encantar disfrutar de unas galletas caseras tan nutritivas como estas.
Ingredientes (36 uds.)
- 170 gramos de harina
- 100 gramos de almendra molida
- una pizca de sal
- 50 gramos de azúcar vainillado (más el necesario para decorar)
- 225 gramos de queso crema (tipo Philadelphia)
- 65 gramos de mantequilla a temperatura ambiente.
Elaboración
Tamiza la harina y mézclala con la almendra molida, la sal y el azúcar vainillado (si no tienes azúcar vainillado puedes utilizar azúcar normal y añadir un poco de extracto de vainilla).
Por otro lado, mezcla el queso crema con la mantequilla, teniendo previamente ambos ingredientes a temperatura ambiente para que resulta más fácil.
Incorpora el queso con mantequilla al recipiente de la harina y mezcla hasta obtener una masa homogénea y fina, forma una bola y a continuación estírala con el rodillo, coloca film transparente sobre la masa para que no se pegue. Dale un grosor de un centímetro y espolvorea toda la superficie con azúcar vainillado.
Cubre la masa de las galletas y déjala reposar en el frigorífico media hora o hasta que adquiera cuerpo y se endurezca. Entonces ponla en la mesa de trabajo y corta porciones de masa con un cortapastas, en este caso hemos utilizado un molde cuadrado y ondulado de 4 centímetros de lado.
Una vez formadas todas las galletas, colocadas en la bandeja sobre papel vegetal o teflón, vuelve a refrigerarlas durante 30-60 minutos.
Precalienta el horno a 200º C con calor arriba y abajo. Cuando la masa de galletas esté preparada y el horno caliente, introduce la bandeja en el horno.
Hornea las galletas de almendra y queso durante 18 minutos aproximadamente, hasta que veas que toman un tono dorado. Al retirar las galletas del horno, colócalas sobre una rejilla para que se enfríen.
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria