Es curioso, como catalanes que somos, que nuestra memoria se pierda al buscar las primeras celebraciones de la ‘Castanyada’, una de las fiestas de la castaña que para nosotros se ha celebrado siempre, y como es normal, en el colegio era motivo de júbilo, de actividades que nos apartaban de las clases menos divertidas para pasar a diseñar murales, disfraces, cucuruchos con papel de periódico… pero ¿de dónde venían las castañas?.
Como parte de nuestra familia es de El Bierzo (y como sabemos la Castaña del Bierzo es una de las más apreciadas, contando incluso con su Marca de Garantía), cada verano veíamos los castaños, y al pasear por su lado nos recordaban que la recolección de la castaña había sido una de las labores familiares, este fruto se convirtió también en algo muy familiar, la fiesta de la castaña en nuestra ciudad de origen y la producción en nuestro lugar de veraneo invitaba a ello.
Siempre nos han gustado las castañas, pero es de mayores cuando además alabamos sus cualidades, y encontramos que en muchos hogares la castaña está olvidada, como explica Flavio Morganti en su libro El árbol del pan, ‘hay que rescatar la castaña del mero papel de protagonista de una fiesta entrañable y ancestral como es el magosto’, en este caso es una celebración gallega.
Aprovechamos este momento para recitar parte de su romance gastronómico: ‘Es el momento de que los cocineros, o si se prefiere artesanos gastronómicos, dediquemos nuestro saber a la búsqueda de la artesanía industrial. Es el momento de la defensa del auténtico valor de los productos, de las materias primas, del esfuerzo, siempre silencioso y pocas veces agradecido, de la gente que trabaja con ellos para nuestro disfrute, para que lleguen a nuestra mesa tal y como llegaron a la de nuestros abuelos. Son los guardianes de la memoria histórica culinaria, de los sabores que se quedan por el camino y, con ellos, lamentablemente, el legado de nuestros ancestros. Pensando ya en nuestros hijos, deberíamos innovar, sí, pero comprometiéndonos con el cuidado y el respeto a la tradición’.
Galicia y El Bierzo ya son reconocidos como productores de castaña, ahora son los catalanes los que quieren formar parte de la imagen de la castaña española, ya que ésta se cultiva actualmente en diversos países de la cuenca mediterránea, extendiéndose por el norte de Europa Central, las Islas Británicas o el sur de Rusia. Hoy descubrimos que en el municipio de Viladrau (Girona) se encuentra una empresa que tiene el objetivo de recuperar los castaños que abundan en las fincas del Montseny, y que desde hace 15 años se celebra la Feria de la Castaña de Viladrau (Fira de la Castanya de Viladrau). En esta feria, que tendrá lugar los días 23 y 24 de octubre, se realizan distintas actividades culturales para niños y adultos, podéis consultar el programa para la Fira de la Castanya 2010 en su página web.
Pero lo que nos ha llevado a contaros todo lo escrito es la intención de que la castaña catalana adquiera relevancia en el mercado como leemos aquí. Nos cuentan que las castañas de Catalunya empezaron a estar presentes en el mercado el pasado año a través de la mencionada empresa de Viladrau, no creemos que sea estrictamente así, pero son ellos los que están empezando a alzar la voz para que se reconozca un cultivo tradicional de su tierra.
Describen a la castaña catalana como frutos más pequeños que los que crecen en Galicia, incluso que los que provienen de China, que son castañas menos harinosas y que la producción que pueden ofrecer es de cinco toneladas, aunque esperan que esta cifra se supere. Por el momento, la idea es que la Castaña de Viladrau se conozca, se identifique en el mercado y se aprecie su calidad. No sólo ofrecen castaña fresca, la intención de que la castaña se convierta en un alimento de consumo para todo el año, hace que trabajen el fruto para ofrecerlo seco o deshidratado, en conserva, en forma de puré de castañas, marron glacé, etc.
Que buenos sabores nos trae el otoño, estamos a un paso de disfrutar de la temporada de las castañas, y con ellas, de las batatas o boniatos, los panellets… Recordaros también que en noviembre se celebra Biocastanea 2010, y vosotros, ¿conocéis alguna fiesta de la castaña en vuestra región?
Foto | Gastroteca