Una investigación realizada por YouGov, firma internacional de investigación de mercados y análisis de datos basada en internet, con sede en Reino Unido, concluye que existen 24 millones de formas para preparar una taza de té, variaciones condicionadas por el tiempo de elaboración, el tipo de endulzante que se utiliza, la temperatura del agua, la opción de añadir leche en diferentes cantidades y el tiempo que se deja infusionar las hojas de té.
La curiosa investigación ha sido encargada por Tetley Tea, la segunda mayor compañía del mundo del té con presencia en más de 40 países del mundo que celebra su 180 aniversario. El estudio ha sido desarrollado y analizado por James Hind, un matemático de la Universidad de Nottingham Trent (Reino Unido) que ha tenido en cuenta todas las posibles variables en la elaboración del té, desde el inicio de su preparación.
Expertos como Sebastian Michaelis, uno de los 10 mezcladores de té más importantes y reconocidos del Reino Unido, con un afinado paladar asegurado en un millón de libras esterlinas, comenta que los 24 millones de posibilidades de preparar un té empiezan con una mezcla perfecta, lo que muestra que existe ciencia tras el arte de prepararse una taza de té. El matemático James Hind trabajó durante varios meses en colaboración con Sebastian Michaelis en las salas de preparación y cata de té de la compañía donde se preparan más de 40.000 tazas semanales para desarrollar una ecuación matemática con la que se ha podido calcular las posibilidades de preparar un té perfecto.
Según explican, las variables clave son la mezcla de las variedades de té, los años de experiencia en su preparación y el peso de cada bolsita de infusión, el algoritmo también contempla factores como el color, tamaño, densidad de la mezcla, el brillo del brebaje, el cuerpo del líquido en boca, la intensidad de sabor en el paladar, etc. El resultado muestra que existe una gran diversidad en la preparación y no existe una única forma de preparar una perfecta taza de té, todas se elaboran según preferencias y gustos de las personas.
Se han obtenido otros datos a partir de esta curiosa investigación, como que el 48% de las personas preparan el té infusionando la bolsita durante menos de un minuto, o que un tercio de los amantes de esta bebida creen que el tiempo de preparación es un factor clave en la preparación del té. Uno de cada diez británicos opta por una versión de proporción más tradicional y un 3% de los que toman té blanco optan por métodos menos tradicionales como el de calentar primero la leche para añadirla a la bebida.
Un 40% de los británicos cree que prepara la mejor taza de té, un 14% prefiere que el té se lo prepare su pareja. Se desprende también que tomar el té en la oficina es algo que podría desaparecer, y sólo un 1% de las personas prefieren que el té se lo prepare uno de sus amigos.
En lo que respecta a los errores de preparación, aquí explican que encabeza la clasificación poner demasiada leche en la bebida, en segundo lugar exprimir en exceso la bolsita de té, y en tercer lugar recalentar la taza de té en el microondas. Básicamente la ecuación no ha hecho más que calcular las posibles formas de preparar un té que podrán ser válidas a nivel individual, pero no quiere decir que todas sean las idóneas para poder disfrutar plenamente de las cualidades organolépticas de las hierbas infusionadas.
Podéis conocer más detalles sobre esta investigación desarrollada por Sebastian Michaelis y James Hind a través de este artículo publicado en la página web de la compañía Tetley.