Plant Based Foods Association (PBFA), organización que aglutina a las empresas que producen alimentos y bebidas derivadas de productos vegetales, ha presentado el informe sobre el estado del mercado de los alimentos de origen vegetal en 2023. Se trata, según la organización, de un profundo análisis realizado por expertos basado en los datos de las ventas minoristas y del comercio electrónico, las tendencias de los servicios de alimentación, las motivaciones y comportamiento de los consumidores, etc.
En este informe se asegura que la industria de los alimentos vegetales ha experimentado una transformación y notable crecimiento en los últimos años, dando una imagen contraria a los resultados de otros estudios en los que se apunta su deceleración. Podemos citar el estudio de Mintel sobre el mercado de los alimentos vegetales sustitutivos de la carne, en el que se concluía que se estaba produciendo una recesión en la categoría de la “carne” de origen vegetal. Otros estudios como el que elaboró WWF (World Wildlife Fund) concluía que dado que el precio es una cuestión importante para los consumidores, la carne tradicional era más valorada que los productos vegetales alternativos, lo que se traduce en una reducción de las ventas y consumo.
Por el contrario, el estudio de PBFA concluye que, por ejemplo, casi el 40% de los compradores del minorista estadounidense Kroger, incrementaron el gasto en alimentos de origen vegetal en 2023, algo que según los analistas demuestra que este mercado sigue evolucionando y expandiéndose con el fin de satisfacer las necesidades de los consumidores.
Según el informe, el mercado de alimentos de origen vegetal está en pleno auge debido a que está impulsado por un variado grupo de consumidores. Según el mencionado informe que se ha realizado junto a Kroger y 84.51°, empresa especializada en el tratamiento y análisis de datos, los motivos para elegir este tipo de alimentos son varios, aunque destaca el tema de la salud como principal impulsor para las compras del 51% de los consumidores de los supermercados Kroger. Tambien se destaca el sabor y la variedad, factores que juegan un papel importante, y así lo aseguran un tercio de los consumidores encuestados, destacando su preferencia por el sabor de los productos de origen vegetal.
Otros informes apuntan que las ventas de alimentos vegetales alternativos a la carne alcanzaron su punto más álgido en 2020, pero desde entonces han ido descendiendo y ha suscitado la preocupación del sector. Y es que no sólo preocupa el precio más elevado, también se apunta a otras cuestiones como el sabor o el aporte nutricional, como problemas que juegan en contra de la categoría alimentaria. Recordemos este estudio de la Universidad Tecnológica de Chalmers (Suecia) en el que se concluía que muchos alimentos procesados vegetarianos, tienen una baja calidad nutricional.
También se pueden citar otros estudios como el realizado por expertos de la Universidad de Duke (Estados Unidos), en el que se apuntaba que la “carne” vegetal difiere mucho de la carne tradicional a nivel nutricional. O el realizado por ‘Action on Salt’, equipo de consenso del Reino Unido que lucha contra el consumo elevado de sal para prevenir sus efectos sobre la salud, en el que se concluía que las “carnes vegetarianas” contienen niveles muy elevados de sal. Y hay muchos más que se podrían citar y que muestran una imagen diferente al estudio que presenta Plant Based Foods Association (PBFA).
Según el estudio de PBFA, se destacan los beneficios para la salud, la preocupación por el medio ambiente y la sostenibilidad como factores que influyen en las decisiones de compra. Un 38% de los clientes de Kroger quiere reducir el consumo de productos de origen animal por razones de salud, y el 33% considera que los alimentos de origen vegetal son más sostenibles. En este sentido, hay que citar el análisis de los productos vegetales concebidos como alternativa a la carne realizado por Nuffield Council on Bioethics (Consejo Nuffield sobre Bioética del Reino Unido), en el que se concluye que no son tan saludables como se presentan debido a que son productos altamente procesados, que pueden contener la misma cantidad de calorías, grasas saturadas y un elevado nivel de sodio.
Un estudio más reciente realizado por Foodwatch concluía que los productos veganos alternativos a la carne no son necesariamente saludables ni honestos, siendo mal calificados por la etiqueta NutriScore, por lo que se considera que no deberían formar parte de una dieta habitual, deberían ser consumidos de forma muy esporádica. Como ya comentamos en su momento, la mayoría de estos alimentos contienen numerosos aditivos, están altamente procesados, tienen baja calidad nutricional, el contenido en proteínas es deficiente, y algunos tienen niveles muy elevados de sal.
Según el informe sobre el estado del mercado de los alimentos de origen vegetal en 2023, en los últimos cinco años las ventas de alimentos de origen vegetal han crecido significativamente, con un incremento del 79% en ventas minoristas desde el año 2018. Por otro lado, en el año 2023 las ventas alcanzaron los 8.100 millones de dólares en Estados Unidos, a pesar de los desafíos económicos (precios más elevados). Productos como cremas, bebidas listas para el consumo, proteínas en polvo, productos horneados y alternativas a los huevos han experimentado un notable incremento en ventas.
El informe apunta que el comercio electrónico ha sido un factor importante, logrando alcanzar los 394 millones de dólares en ventas el año pasado, con un crecimiento anual compuesto del 16,4% entre los años 2020 y 2023. Los alimentos de origen vegetal tienen una mayor presencia en las ventas online con un 6,8%, en comparación con las tiendas físicas cuyo volumen se establece en el 3,8%, algo que se explica por la inexistencia de la falta de espacio en las estanterías digitales, es decir, se puede mostrar una oferta mucho más amplia.
Se asegura que los alimentos de origen vegetal han superado a los alimentos de origen animal en diferentes áreas, por ejemplo, en 2023 las ventas de bebidas vegetales alcanzaron los 2.900 millones de dólares, mientras que la venta de leche de origen animal se redujo en 280 millones. Hay que destacar que esa reducción de la venta de leche de vaca ocurre desde hace años, en las dos últimas décadas se redujo en un 22%, de ello hablábamos en este post. En este sentido, los datos concuerdan con los aportados por el estudio de PBFA.
Se comenta que el futuro del mercado de alimentos de origen vegetal es prometedor, con un crecimiento continuo en todas las áreas, y esto es gracias a la conciencia sobre la sostenibilidad y los beneficios para la salud, que unido a la variedad de productos disponibles, seguirán impulsando la demanda. Por supuesto y según el estudio, el segmento de los alimentos de origen vegetal se enfrenta a diversos desafíos, especialmente debido a la competencia con productos de origen animal que son más económicos y que están favorecidos por subsidios gubernamentales.
El estudio que hemos conocido aquí, no parece ser imparcial y tampoco es lo suficientemente crítico, quizá debido a que lo ha realizado una organización que defiende los intereses de las empresas que elaboran alimentos y bebidas derivadas de productos vegetales. Que cada uno saque sus propias conclusiones. Podéis acceder al estudio a través de este artículo publicado en Plant Based Foods Association.