Espuma de crema catalana ligera

Generalmente se utiliza nata para la elaboración de espumas en el sifón de cocina desarrollado para esta finalidad, pero también se pueden hacer sin esa adición de grasas, a continuación os mostramos cómo hacer una Espuma de crema catalana ligera, consiguiendo que tenga cuerpo, aunque como el resto de espumas, hay que servirla justo antes de su degustación.

Este caprichito para el paladar no alterará la dieta, deciros que hemos utilizado en algunas ocasiones leche semi descremada. Si una vez que probáis la espuma de crema catalana ligera no tiene el cuerpo que se espera de una espuma, probad a introducir otra carga y dejar reposar de nuevo.

Ingredientes

  • ½ litro de leche
  • 4 yemas de huevo
  • 75 gramos de azúcar
  • un trocito de piel de limón
  • 1 ramita de canela
  • 3 hojas de gelatina (cola de pescado).

Para acompañar
  • Azúcar
  • bolitas de chocolate crujientes.

Elaboración

Pon las hojas de gelatina en remojo en agua fría. En un cazo, pon la leche, la piel de limón y la canela, calienta a fuego medio. Mientras tanto, pon en un cuenco amplio las yemas de huevo y el azúcar, mezcla bien con las varillas.

Cuando la leche vaya a entrar en ebullición, retira el cazo del fuego. Cuela la leche para retirar la piel de limón y la canela y a continuación viértela poco a poco en el recipiente que contiene las yemas, sin dejar de remover con las varillas. Incorpora entonces las hojas de gelatina y mezcla bien hasta su total disolución.

Vuelve a colar el preparado para crema catalana y deja templar. Después pásalo al sifón de espumas de medio litro, sin llegar a llenarlo totalmente y pon dos cargas. Reserva el sifón en el frigorífico, tumbado, hasta el día siguiente.

Antes de servir la espuma de crema catalana en la copa o vaso de servicio, prueba que sale bien sobre un plato.

Emplatado

Esta receta de crema catalana puede complementar muchos postres o ser la estrella del mismo, acompañándola sencillamente con unas bolitas de chocolate, una base de frutas troceadas, un brownie de chocolate o un bizcocho desmigado… a vuestro gusto.

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