La compañía startup DNATrek propone un sistema con el que se podrá garantizar mucho mejor la trazabilidad alimentaria, pues permite identificar fácilmente toda la información sobre el origen, la producción y procesamiento. El sistema se basa en un espray con tecnología ADN, se trata de una solución líquida sin sabor ni olor, con la que se rocían alimentos como frutas y verduras para que quede en ellos impreso un código de barras genético.
El espray con tecnología ADN para la trazabilidad alimentaria tiene su origen, como suele ocurrir en muchas ocasiones, en una tecnología desarrollada para cuestiones militares, concretamente en un sistema de rastreo de ADN que desarrolló el Laboratorio Nacional Lawrence Livermore, para la defensa biológica subvencionada por el Departamento de Defensa de Estados Unidos. Uno de los responsables de la empresa DNATrek, vio que esta tecnología se podía aplicar en el mundo de la seguridad alimentaria, con estos códigos de barra genéticos se podría detectar rápidamente su origen en el caso de que se produjera un brote infeccioso, algo que es complicado con la tecnología actual.
La empresa desarrolla los códigos de barra genéticos a partir de ingredientes naturales, son 100% seguros y el sistema cuenta con la aprobación de la FDA (Food and Drug Administration). Según explica DNATrek, basta una millonésima parte de un gramo de producto, para poder integrar en él la información relativa al origen, la fecha de cosecha, el campo donde se cultivó, quién realizó la recogida y manipulación, quién fue la empresa envasadora, etc.
Para recuperar toda esta información se utiliza un hisopo, un simple bastoncillo que se utiliza en medicina para recoger muestras y posteriormente procesarla en un aparato que se encarga de leer el código y posteriormente imprimir o enviar al ordenador todos los datos que en él se encierran. La empresa explica que se pueden crear un número infinito de códigos de barra genéticos que se pueden generar en cualquier punto de la cadena alimentaria para integrarlo. Claro, que este sistema tiene otras muchas aplicaciones, es un marcador interesante con el que frenar el fraude alimentario, realizar un seguimiento de los alimentos o detectar un foco de infección causante de una enfermedad transmitida a través de los alimentos, entre otros.
Los responsables de DNATrek explican que el actual sistema de trazabilidad de los alimentos es complicado, el rastreo es poco concluyente o se necesitan varias semanas para llegar al origen de un alimento. A la falta de fiabilidad hay que añadir que es un sistema cuyo precio es elevado, por ello propone como alternativa el espray con tecnología ADN. El sistema trabaja con fragmentos de ADN sintéticos o material genético biológico que no se encuentra en los productos a rociar, como por ejemplo algas u otros organismos marinos. Se garantiza además que el ADN pulverizado en la superficie de los alimentos se puede eliminar rápidamente tras haber realizado la oportuna identificación.
Una de las principales ventajas de este sistema es que se reduce significativamente el riesgo de que la información del producto se pierda. Las cajas en las que se transportan frutas y verduras con las etiquetas sobre su origen y otro tipo de información se puede desechar y se pierde toda información del producto, el etiquetado de las piezas de fruta es susceptible de fraude, se puede etiquetar un producto con información que no se corresponde, por lo que la información sobre su trazabilidad de poco sirve. En este sentido, quizá otra buena solución es el etiquetado láser, recordemos que este año la empresa Natural Ligth Labeling System recibía la aprobación de Agencia de Medicamentos y Alimentación de Estados Unidos, del uso del sistema de etiquetado láser en todas las variedades de alimentos cítricos.
La tecnología del espray para la trazabilidad de los alimentos permite que se puedan aplicar múltiples capas de pulverización, es decir, cada uno de los eslabones de la cadena alimentaria puede utilizar su propio spray con su información, el agricultor rociaría los datos relativos al cultivo, el campo, la recogida, etc., la empresa procesadora la información sobre la clasificación, el operario que ha manipulado el producto, la caja donde se ha colocado… La empresa responsable del transporte puede integrar la información relativa a la ruta y a quién ha sido entregada la mercancía. Estas múltiples capas aportarían una información muy completa del producto.
Aquí explican que estos códigos de barra están divididos en dos partes, un código único fijo que asigna DNATrek a la empresa, y un código configurable en el que se integran los parámetros que se deseen y que ya hemos citado anteriormente. Según la empresa y el dictamen de la FDA, este material es totalmente inofensivo en el caso de que sea ingerido por los consumidores, recordemos que se utiliza material obtenido de algas y otros productos marinos.
Ahora es necesario llevar a cabo diferentes pruebas piloto para certificar la eficacia del sistema de trazabilidad alimentaria con cinco o seis tipos de productos, la empresa está segura obtenerla al 100%. DNATrek asegura que se puede aplicar en muchos productos y se puede integrar la información que se desee. Para conocer más detalles del nuevo sistema de etiquetado de trazabilidad os recomendamos acceder a la página web de la empresa.