Hace unos días hacíamos alusión a la espátula para galletas, fue en la receta de Speculoos, al requerir un accesorio con el que recoger las galletas de la superficie en la que se habían horneado para posarlas sobre la rejilla, donde se enfriarían y en ese proceso, tomarían la textura crujiente.
La espátula para galletas principalmente es para eso, para poder cogerlas delicadamente cuando todavía están calientes. En muchos casos en este estado las galletas todavía están blandas, y cogiéndolas con las manos o con otro utensilio posiblemente haríamos que perdiesen su forma o que parte de la galleta se quedara adherida a la tela de cocción o a la bandeja, pues aunque sea una superficie antiadherente, estando la galleta caliente puede necesitar un poco de ayuda para desprenderse de forma limpia.
Este es uno de los principales usos de la espátula, coger las galletas de forma delicada por la base para poder depositarlas en otra superficie, y no sólo cuando hablamos de galletas recién horneadas, este utensilio posiblemente sea imprescindible para quienes elaboran galletas decoradas, pues éstas son aún más delicadas durante el proceso de elaboración.
Como veis, las espátulas para galletas de las que hablamos son como paletas anchas, pensadas para las galletas de gran tamaño (jumbo) que son precisamente las que después del horneado son más delicadas de coger de la bandeja del horno. No obstante, estas espátulas también son prácticas para coger otras elaboraciones reposteras, bizcochos, tartas, brownies, profiteroles o lionesas, macarons, whoopie pies…
Podemos elegir entre diversos modelos de este accesorio de repostería, hay muchos fabricantes que ofrecen una espátula con las mismas prestaciones, debemos valorar los materiales, la comodidad a la hora de cogerla, que se deslice fácilmente bajo la galleta sin rayar la superficie antiadherente…
Wilton es una de las marcas de moda y de calidad que inundan con sus ingredientes y utensilios las tiendas especializadas en repostería, su espátula para galletas es la que encabeza el post, es de acero inoxidable con el mango de silicona, mide 28 cm de largo y cuesta unos 6-8 euros, dependiendo de la tienda en la que se compre.
Podríamos enseñaros más modelos, pero viendo relación calidad-precio, en la red no hemos encontrado nada mejor. Siempre podéis aportar vuestra recomendación si resulta interesante para mejorar la compra de los lectores aficionados o apasionados de la repostería y la cocina en general (no la venta de los comerciales). Una propuesta que ya os podemos adelantar es el uso de las tradicionales espátulas de pintor, no son específicas pero dan buen servicio. Por unos tres euros, en la ferretería de cualquier barrio se encuentran muchos modelos con distintas amplitudes, diferentes materiales y en consecuencia, calidades.
Para uso ocasional funcionan muy bien, pero para quien habitualmente elabora galletas, la línea acodada de la espátula para galletas que os mostramos en la fotografía es la ideal.