La compañía Danisco con sede en Copenhague (Dinamarca), acaba de lanzar al mercado dos nuevas enzimas para prevenir el endurecimiento del pan y mantenerlo fresco y blando durante 10 días. La nueva generación de enzimas denominada G+ se pretende utilizar especialmente en los panecillos y bollos, productos que tienden a endurecerse con mayor rapidez, aunque también se podrá utilizar en diferentes tipos de panes renovando el concepto de la durabilidad.
Con las enzimas G+ se ha desarrollado el PowerFresh Bun, un producto que logra modificar la amilopectina (elemento que constituye un 75% de los almidones más comunes), en este caso del almidón de la harina durante la cocción del pan. Tras el horneado se obtiene un pan que se mantiene suave y blando sin perder, supuestamente, la dureza o consistencia que ofrece un pan tras su horneado. La línea del PowerFresh Bun contempla dos productos diferentes con enzimas para evitar el endurecimiento del pan, PowerFresh Bread para el pan de estilo americano (pan de molde), y PowerFresh Special with G+ para pan dulce, bollos de leche, etc.
Las nuevas enzimas para prevenir el endurecimiento del pan se han desarrollado tras tres años de investigación, se han realizado diferentes pruebas para controlar la calidad y sabor del producto final y al parecer los resultados han sido satisfactorios. Evidentemente se trata de un producto muy interesante para la panadería industrial, de momento la empresa danesa cree que el nuevo producto gozará de gran popularidad en el mercado estadounidense, aunque en Europa deberá superar primero la evaluación y reglamentación correspondiente para que se pueda comercializar.
Los nuevos aditivos alimentarios para el pan incrementarán los beneficios de los fabricantes, pero como contrapartida, habrá ocasiones en las que los consumidores no recibiremos bollos recién hechos. Personalmente preferimos la elaboración de pan casero y sin aditivos. Antaño se compraban buenos panes que se mantenían tiernos durante varios días ofreciendo una textura y una crujibilidad óptima. Hoy en día se comercializa pan que pasa de un estado crujiente a una textura de chicle en cuestión de horas, se les incorporan demasiados aditivos, estabilizantes y demás productos que aceleran su elaboración, yendo en contra de la calidad y la esencia de un buen pan.
Las enzimas para prevenir el endurecimiento del pan es un gran avance pero entre comillas y especialmente para la industria, será más complicado para los consumidores disfrutar de un buen pan del día, a no ser que lo hagamos nosotros mismos. Podéis conocer más detalles sobre los aditivos para ampliar la vida del pan a través de la página oficial de PowerFresh.