Durante los últimos años el Reino Unido se ha enfrentado a varios escándalos alimentarios, la contaminación de la carne de pollo por Campylobacter, el fraude en el que se realizó la sustitución del comino de los alimentos procesados por cáscara molida de almendras o cacahuetes, la comercialización de pescado fresco que en realidad no era tan fresco y se había capturado dos semanas atrás, la posible comercialización de productos cárnicos mezclados con carne y despojos, o el sonado escándalo de la carne de caballo donde se sustituía parte de la carne de vacuno por este tipo de carne. La gran cantidad de fraudes y problemas sanitarios con la alimentación ha llevado a la FSA (Food Standards Agency), Agencia de Normas Alimentarias del Reino Unido, a elaborar un plan de trabajo para mejorar la calidad de los alimentos del país.
Se ha dado a conocer el denominado Plan Estratégico Alimentos en los que se puede confiar, el objetivo de este plan es proteger la salud pública y los intereses de los consumidores en relación a los alimentos, la comida debe ser segura y las etiquetas alimentarias deben ser veraces y ofrecer una información correcta y transparente. Se pretende además que la población pueda tener acceso a una dieta saludable y que los consumidores puedan tomar decisiones informadas sobre lo que se come actualmente y en un futuro.
El plan tiene como objetivo realizar los cambios necesarios hasta el año 2020, la FSA comenta que se trata de un desafío complicado ya que existen crecientes desafíos en torno a la seguridad alimentaria, la accesibilidad y la asequibilidad a los alimentos, la sostenibilidad y la seguridad. El plan se ha publicado con la intención de mostrar el compromiso y responsabilidad que adquiere la FSA para con los consumidores del Reino Unido, se pretenden cumplir todos los puntos que en él se muestran, la agencia asegura que va a utilizar todas las herramientas que están a su alcance, la ciencia, las pruebas analíticas, los controles, procesos legislativos y no legislativos, y todos aquellos procedimientos que puedan hacer frente a los riesgos emergentes actuales y de futuro.
Esto no es algo que sorprenda, la popularidad de la FSA ha caído bastante, se ha cuestionado su modo de trabajar y su efectividad, con este plan se espera poder recuperar la confianza del consumidor y la credibilidad en la Agencia de Normas Alimentarias. Se anuncia el modo de empoderar a los consumidores en la política de decisiones y su ejecución en relación a la industria alimentaria. En este plan estratégico se muestran las principales actividades de la FSA en el período 2015-2020, la agenda con las tareas que se van a realizar año tras año para velar por los intereses de los consumidores en relación a la alimentación.
En la agenda se explica a rasgos generales que en el periodo 2015-2016 se va a trabajar para garantizar que la contaminación por Campylobacter se reduzca a menos del 10% en la carne de pollo, se pondrá en marcha un plan para reducir la incidencia de la listeria, se empezará a trabajar en la medición relativa al riesgo alimentario y su impacto. En el periodo 2016-2017 se revisarán los resultados de la campaña contra la Campylobacter y se acordarán nuevos pasos a seguir. En el periodo 2017-2020 se seguirá trabajando con las medidas para reducir la listeria y se concluirá el trabajo sobre la identificación de riesgos e impacto, para volver a poner en marcha nuevas medidas que fortalezcan aún más la seguridad del sistema alimentario.
También se anuncian medidas para consolidar la Unidad del Crimen de los Alimentos, establecer mecanismos informativos y abrir vías de comunicación con otras agencias para poder mejorar la capacidad de reacción ante un posible problema alimentario. Se realizarán propuestas al Gobierno del país que permitan a los Ministerios competentes dar los pasos oportunos para mejorar la protección de los consumidores. Se explica el papel regulador de la FSA y como estará influenciado por el Reglamento de la Unión Europea sobre alimentación. El plan contempla muchos puntos, ya veremos si la FSA es capaz de llevarlo a cabo, es evidente que ante tanto escándalo alimentario, es necesario cambiar las políticas que se han llevado a cabo hasta el momento ya que a la práctica, se demuestra que no han funcionado como debieran.
A través de este enlace (Pdf) podréis conocer todos los detalles sobre el Plan Estratégico Alimentos confiables del Reino Unido.