Al reciente problema de la mozzarella de búfala italiana contaminada con dioxina, ahora deberemos añadir otro nuevo escándalo alimentario, al parecer, el vino italiano está contaminado con sustancias tóxicas. Nada menos que casi 70 millones de litros de vino presentan en su composición todo tipo de sustancias químicas.
Ácido clorhídrico, fertilizantes, pesticidas, azúcar, etc., todos estos vinos se comercializan sobre todo en Italia y son vinos de bajo coste. Curiosamente hace escasos días conocíamos un informe en el que se mostraba que todos los vinos no biológicos podrían contener pesticidas, aunque hay que decir que el caso italiano es mucho más grave.
Gracias a una investigación realizada por el departamento de control de los productos alimentarios en estos vinos, se pudo descubrir esta situación, hasta 20 empresas del sector de distintos puntos del país se encuentran implicadas, incluso localidades que son famosas por los excelentes productos que brindan al mercado, como por ejemplo Módena o Verona, entre otras.
El periódico L’Espresso daba a conocer la noticia, afirman que la mafia se encuentra de nuevo en medio del asunto, según esta publicación, se trata de un sistema industrial en el que se añaden diversas sustancias químicas a los vinos para así reducir el coste de producción hasta en un 90%. Los análisis asustan, todas las sustancias que hemos mencionado se encuentran presentes, a saber cuánto tiempo llevarán comercializando este vino adulterado y si ha sido exportado a otros países.
Parece ser que hasta ahora no se había detectado esta situación porque el ácido empleado transformaba los azúcares, cuya inclusión está prohibida, en fructosa y glucosa, elementos que se camuflarían y pasarían inadvertidos en los análisis rutinarios. De momento se ha logrado retirar una parte del vino contaminado del mercado, pero difícilmente se van a poder localizar todas las partidas, una cosa sí se sabe, son vinos que se comercializan a un precio de entre 70 céntimos y dos euros, suponemos que la población los evitará por el momento.
El Ministro de Agricultura italiano tiene la desfachatez de indicar que no hay que ser alarmistas y que sólo se trata de unas pocas empresas, además afirma que no se ha exportado ninguna partida de vino, tras el tema de la mozzarella, dudamos de sus afirmaciones, ya que es difícil demostrarlas.
Nos preocupábamos de la contaminación de los alimentos chinos y va a resultar que existe más peligros alimentarios en los países comunitarios.
