La Real Academia de la Lengua (RAE) define el vino como ‘Licor alcohólico que se hace del zumo de las uvas exprimido, y cocido naturalmente por la fermentación’. En Wikipedia lo definen como ‘bebida obtenida de la uva (especie Vitis vinifera) mediante la fermentación alcohólica de su mosto o zumo’. La Organización Internacional de la Viña y el Vino (OIV) lo define como ‘bebida resultante de la fermentación alcohólica completa o parcial de la uva fresca, estrujada o no, o del mosto de uva’. Si buscamos fuera de nuestras fronteras, por ejemplo la definición que ofrece el diccionario inglés Oxford, dice: ‘Bebida alcohólica hecha de jugo de uva fermentada’. Podemos seguir citando varias fuentes que definen básicamente al vino como una bebida alcohólica y no un licor.
Por otro lado, la RAE define licor como ‘Bebida espirituosa obtenida por destilación, maceración o mezcla de diversas sustancias, y compuesta de alcohol, agua, azúcar y esencias aromáticas variadas’, en Wikipedia se define como ‘Bebida dulce (o seca), a menudo con sabor a frutas, hierbas o especias, y algunas veces con sabor a crema’. En otras fuentes ofrecen una definición similar añadiendo o restando información, pero básicamente dicen lo mismo. Hablamos de esto porque hace un par de semanas David López, ingeniero agrónomo y profesor de Legislación Vitivinícola del Máster en Vinicultura y Enología de la Escuela Politécnica Superior de Orihuela (EPSO), envió un documento a la RAE porque considera que se equivoca, asegura que no se puede decir que el vino es un licor.
El experto explica que en la palabra licor se enmarcan los destilados o macerados, pero en ningún caso las bebidas que se obtienen mediante fermentación como el vino. Dar esta definición puede generar confusión, argumenta que la RAE utiliza palabras con el mismo significado, por ejemplo la palabra fermentación es aceptada por la RAE como sinónimo de cocer en su acepción octava: ‘Dicho de algunos líquidos, como el vino: fermentar’. Para el profesor no sólo es una definición errónea del vino, también es indigna teniendo en cuenta que España es uno de los principales países productores del mundo. Añade además que no se trata tampoco a esta bebida como un alimento que forma parte de la Dieta Mediterránea y de la cultura de nuestro país.
El profesor ha realizado su escrito recogiendo la definición de vino de la Organización Internacional de la Viña y el Vino, y de la Ley Española de la Viña y el Vino (B.O.E) en la que se define como ‘Alimento natural obtenido exclusivamente por fermentación alcohólica, total o parcial, de uva fresca, estrujada o no, o de mosto de uva’. Explica que la definición legal de vino gira sobre dos conceptos, la uva y su carácter como alimento, ya que todas las definiciones proporcionadas por estos organismos hacen referencia a estas características.
La RAE no considera al vino como un alimento, por ello, David López decidió comprobar cuál era la definición que proporcionaba la Real Academia de la Lengua sobre alimento, entre algunas de las definiciones podemos leer: ‘Conjunto de cosas que el hombre y los animales comen o beben para subsistir’. Sin embargo, en el Código Alimentario español se define así: ‘Todas las sustancias o productos de cualquier naturaleza, sólidos o líquidos, naturales o transformados, que por sus características, aplicaciones, componentes, preparación y estado de conservación sean susceptibles de ser habitual e idóneamente utilizados a alguno de los fines siguientes: a) Para la normal nutrición humana o como fruitivos, b) Como productos dietéticos, en casos especiales de alimentación humana’.
El profesor destaca también el valor fruitivo del vino, es decir, que es un alimento que además nos hace disfrutar de su consumo. Según leemos en el artículo de la UMH (Universidad Miguel Hernández de Elche), David López cree que no se puede considerar esta cuestión de poca importancia, ya que si se considera al vino como alimento y no sólo como bebida alcohólica, pasa forzosamente a formar parte de la dieta, y por ende, de la cultura del territorio.
Explica que la definición es incorrecta, y además no aclara el carácter alimentario y de disfrute del vino, por todo ello realizó la reclamación a la RAE para que revise la definición proporcionada al vino. De momento no ha recibido respuesta, ya veremos cuánto tarda la RAE en contestar y qué argumentos aporta para considerar que el vino es simplemente un licor.
