COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos) acaba de publicar los datos del IPOD de mayo de 2023, recordemos que el Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos (IPOD) nos muestra la diferencia entre lo que se paga al agricultor por algunos productos básicos de la cesta de la compra, y lo que los consumidores pagamos en el mercado.
Los nuevos datos muestran que, de nuevo, se mantiene una tendencia al alza, en el mes de abril el IPOD general fue del 3’68%, y ahora suma ocho décimas estableciéndose en mayo con un índice del 3’76%. Los resultados del IPOD de mayo muestran como producto más destacado los pepinos, según las cifras el precio que los consumidores hemos pagado por los pepinos es siete más de lo que ha cobrado el agricultor, concretamente 7’36 veces, por lo que se puede hablar de una diferencia abusiva y especulativa.
En el campo, el kilo de pepinos cotizó a una media de 0’22 euros, es decir, su precio ha caído nada menos que 0’37 euros, y si comparamos con el mes de marzo, la caída es de 0’86 euros. En el mercado, los consumidores pagamos una media de 1’62 euros por kilo de pepinos, es decir, 0’24 euros menos, lo que muestra que la bajada de precio en el campo no se ha trasladado íntegramente al consumidor, pero los intermediarios sí han ampliado aún más su margen de beneficios.
Las aceitunas de mesa son el segundo producto destacado por superar la barrera imaginaria del 500%, con una diferencia porcentual origen/destino del 535%, lo que supone un aumento del 15%. En origen, el precio por kilo de aceitunas de mesa se mantiene en 0’91 euros, en cambio, en el mercado se incrementa 14 céntimos hasta situarse en los 5’78 euros, por lo que de nuevo se puede observar que los intermediarios aumentan su margen de beneficios y cargan exclusivamente el aumento al consumidor. Estos datos muestran que en el recorrido del campo a la mesa, las aceitunas multiplicaron su precio por 6’35.
El tercer producto destacado en el IPOD de mayo es la lechuga, cuya diferencia porcentual origen/destino se estableció en el 532%, lo que supone un aumento de nada menos que un 93%. En el campo, el kilo de lechuga se cotizó a una media de 0’19 euros, lo que supone una caída de cuatro céntimos respecto al mes de abril, y en el mercado, el precio medio de venta se estableció en 1’20 euros por kilo, cuatro céntimos menos que en el mes de abril. Los datos muestran que en el trayecto del campo a la mesa, los consumidores hemos pagado 6’32 veces el valor de esta verdura en el campo.
Aunque no superan la barrera imaginaria del 500%, COAG destaca las patatas y los plátanos por tener una diferencia que supera el 400%, esto nos hace pensar que es muy probable que en el próximo indicador, estos alimentos y en especial las patatas (porque es algo que ocurre cada año), superen fácilmente la diferencia del 500% en las próximas semanas.
Las lluvias torrenciales, la sequía, las importaciones de terceros países y otros tantos problemas, son argumentos para subir el precio de algunos alimentos, pero en muchos casos, la subida es realizada por los intermediarios, no por los agricultores, que perciben por sus productos unos precios que en ocasiones no compensan ni siquiera los costes de producción. En fin, veremos qué ocurre en el próximo IPOD, pero es fácil deducir que aparecerán nuevos productos marcados en rojo por superar esa barrera del 500%. Podéis conocer más detalles del Índice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos de mayo de 2023 a través de la página oficial de la coordinadora.
Foto | Arcadius