Sobre estas líneas podéis ver un magnífico vídeo sobre la labor de un apicultor, y nos parece un vídeo muy especial por varios motivos, principalmente porque nos ha transmitido la sensación de adentrarnos en el hogar de las abejas, de estar revoloteando entre ellas y de sentir la familiaridad que las une, como explicaba El apicultor descalzo.
Sin duda, es un gran trabajo del autor del vídeo, Szymon Masiak, y del apicultor, ¿habéis visto que hogares ha diseñado para sus abejas? A Edward Kaspara, el apicultor de Bulowice (Polonia), que podemos denominar ‘El apicultor sin guantes’, se le reconoce una pasión por el cuidado de sus enjambres, para los que ha creado colmenas que lucen como atractivas casas de muñecas, con distintos diseños, colores y detalles.
En el vídeo nos explican cosas sobre la apicultura muy básicas, qué es un apicultor, que una colmena puede ser un hogar para más de 100.000 abejas trabajadoras, que las colmenas pueden tener distintos diseños, y algunos tan espectaculares como estos. Hablan también sobre la necesidad de los apicultores de utilizar ropa protectora y otros dispositivos, como el ahumador, para evitar al máximo las picaduras de las abejas, aunque vemos que Edward Kaspara únicamente se pone el protector para la cabeza como prenda especial.
Hay personas que parece que son inmunes a sus picaduras, y lo contamos por experiencia propia, como os hemos comentado en otras ocasiones, en casa se ha practicado la apicultura. Pero las abejas no piensan en picar, sino en producir miel, y como continúan explicando en el vídeo, aunque no están domesticadas, su naturaleza les hace mantenerse unidos, salir a recolectar el néctar y a polinizar, regresar a su hogar y seguir trabajando.
Su labor nos proporciona mucho más de lo que podemos imaginar, no sólo hay miel, polen, jalea real… de su polinización depende un elevadísimo porcentaje de los cultivos que alimentan al mundo.