Para responder a la pregunta con la que titulamos estas líneas, dónde comer un buen croissant en Barcelona, podríamos hacer una larga lista porque es una gran ciudad con una enorme tradición en pastelería artesana, pero hoy vamos a hablar de una pastelería que ha demostrado por segunda vez que hace unos croissants de premio.
Hablamos de Brunells, una de las pastelerías más antiguas de la ciudad de Barcelona, pues se fundó en el año 1852 y desde entonces ocupa el mismo local de la concurrida Calle de la Princesa, concretamente el número 22. Aunque ha cambiado de manos no hace muchos años, y es que era un negocio familiar que en 2018 se puso en traspaso y lo reabrieron tres socios, Luis Estrada Canal de Pastelería Canal, Salvador Sants de Cafés el Magnífico y Joan Guash de LKC, con el pastelero Andreu Sayó al frente.
Sobra decir que esta pastelería es de visita obligada para quienes disfrutan realizando turismo gastronómico cuando acudan a la Ciudad Condal, y también para quienes quieran descubrir o seguir disfrutando de las creaciones de pastelería tradicionales de Cataluña, como uno de los mejores croissants del país, entre otras.
Y es que, Andreu Sayó de la pastelería Brunells, se ha vuelto a alzar con el Premio Mejor Croissant Artesano de Mantequilla de España en su edición de 2024, y decimos que ha vuelto a ganar porque este premio ya lo obtuvo en el año 2020. Y pasó lo que os comentábamos en la convocatoria de este concurso de pastelería, que las ventas de croissants de Brunells se multiplicó por diez.
Algunas características del Mejor Croissant Artesano de Mantequilla de Brunells
🔸Utilizan ingredientes de calidad, son respetuosos con el amasado, y dan un reposo en bloque a la masa, pues ayuda a potenciar el sabor
🔸Además de azúcar, endulzan con miel para mejorar la humedad, la conservación y el aspecto
🔸No utiliza mejorante, la masa lleva levain sobrante de la elaboración de pan
🔸Es un croissant con muchas vueltas para que sea crujiente y ligero, y procuran que al hornearlo retenga al máximo la mantequilla
🔸Mantienen regularidad en la elaboración de los croissants en base a una receta equilibrada, el cliente quiere siempre el mismo croissant, con su mismo sabor, hojaldrado, aspecto…
Por cierto, según en qué época paséis por Brunells, también podréis probar otros dulces de la pastelería catalana que son de premio, como la Coca de San Juan en sus versiones de chocolate y creativa.