De los beneficios y virtudes en la cocina de los frutos secos os hemos hablado a menudo, de hecho, podéis comprobar que en nuestras recetas los utilizamos mucho, nueces, avellanas, pistachos, almendras… quizá éstas últimas sean las que más a menudo incorporamos a nuestras recetas. Por ello hemos realizado varios recopilatorios con este fruto seco, desde las Doce recetas con almendra a las Doce recetas con harina de almendra. Pues hoy hacemos lo propio con otro formato de este fruto seco muy habitual en nuestra despensa, Doce recetas con almendra picada o granillo.
La almendra la podemos encontrar entera, con su cáscara y cruda, podemos encontrar los almendrucos, las almendras peladas fritas o tostadas, con la fina piel o sin ella. También podemos comprar la almendra cruda entera, laminada, picada y molida… Os tenemos que confesar que en nuestra despensa solemos tener todas las variedades, unas para tomar como aperitivo (es un aperitivo o pica pica muy nutritivo y saludable), y otras para las recetas, siempre tienen salida por lo que os comentamos, las almendras, igual que otros frutos secos, son capaces de aportar mucho a una elaboración culinaria, sabor, textura, estética…
Pero sin más dilación, para quienes os encontréis que habéis comprado unas almendras granillo o picadas para una receta y no sabéis qué más hacer con ellas (a sabiendas de que los frutos secos en este estado tardan menos tiempo en ponerse rancios), aquí os dejamos algunas propuestas, doce recetas con almendras muy variadas, hay entrantes, platos principales y postres, incluso unos delicioso panecillos.
Podéis identificar las recetas con las fotos que ilustran este post en el orden habitual, de izquierda a derecha y de arriba a abajo. Esperamos que os gusten.
Cremoso de queso de cabra y berenjena: En un aperitivo en el que todos sus componentes son cremosos, hacía falta aportar algo de textura y las almendras picadas resultan ideales, después de tostarlas son aún más sabrosas y combinan de maravilla con el conjunto de sabores de esta elaboración.
Ensalada de melón, queso feta y vinagreta de anchoas: Las almendras forman parte del aderezo de esta ensalada, en esta ocasión no las tostamos para que su sabor sea más suave, otros ingredientes como la anchoa o el queso feta son los que invierten más sabor. De todas formas, esta vinagreta de anchoas se puede hacer con almendra tostada y además puede servirse con muchas otras ensaladas.
Pasta con setas y sobrasada: En este plato las almendras no sólo aportan su sabor y su textura, además están tan integradas en el guiso ligero de setas y sobrasada, que los intensifica. Una receta de pasta diferente que os va a encantar.
Merluza al horno con costra de almendra: Nos encantan las recetas de pescado en los que napamos con una capa de frutos secos y otros ingredientes creando una costra crujiente y llena de sabor, son muchos los contrastes que proporciona en cada bocado y ayudan a disfrutar mucho más de cada uno de ellos.
Salmón al horno con costra de naranja y parmesano: Otra opción para gratinar el pescado, en este caso el salmón, con una costra crujiente y sabrosa, una verdadera delicia que os sorprenderá por su sencilla elaboración y por su resultado, para repetir.
Conejo al ajillo: La mayoría de vosotros tendréis vuestra receta de conejo al ajillo, es un plato tradicional, pero como sucede a menudo, cada cocinero aporta su toque. En este caso, nosotros añadimos una picada, un elemento muy popular en la cocina catalana, que incluye frutos secos, tostadas o galletas, ajo, hierbas aromáticas…
Kofta de ternera con salsa picante: Esta especie de albóndigas son tradicionales de la gastronomía de Oriente Medio y del sur de Asia, hay distintas formas y fórmulas para hacerlas, y una vez más aportamos un contraste de textura a la carne con unas almendras picadas. Del mismo modo se podría hacer en las albóndigas de nuestra cultura gastronómica, o en las hamburguesas… probad las koftas, os van a encantar.
Butifarra con setas: Para disfrutar de una buena butifarra artesana nos encanta la parrilla o la barbacoa, pero en la cocina de casa también se pueden hacer platos tan sabrosos como este, nos inspiramos en una receta de José Andrés, muy sencilla y exquisita. Y ahí están las almendras, aportando su sabor tostado y su textura crujiente a un conjunto de elementos tiernos y jugosos.
Panecillos de albaricoque y almendra: Estos panecillos son de los que no sabes si tomar en el desayuno, armonizar con una comida especial… para cualquier ocasión son una delicia, incluso comiéndolos solos. Y no tengáis miedo a hacerlos si no habéis hecho pan antes, son muy fáciles de hacer.
Ciruelas con Amaretto: Este es un ejemplo de un postre de fruta de temporada en la que enriquecer y potenciar ciertos sabores con la almendra en granillo tostada. Probadlo con las ciruelas, y cuando no estén de temporada atreveos con otras frutas, desde unas peras a la piña, unos caquis persimon o unos plátanos.
Bombón helado de chocolate y plátano: La cobertura crujiente de los bombones o de los helados con chocolate y frutos secos son un regalo para el paladar de los golosos, tomad nota de la receta y disfrutad.
Muffins de almendra y coco: Nos encantan las almendras picadas en los bizcochos, el clásico bizcocho 3, 2, 1 o el bizcocho que se elabora midiendo los ingredientes con el vaso del yogur, siempre lo hacemos con almendra granillo en la masa, resulta muy agradable encontrar los trocitos crujientes y sabrosos. Probadlo de momento con estos deliciosos muffins, seguro que os encantará.
¡¡Feliz Semana!!