Hoy 15 de junio se celebra el Día Mundial sin Carne 2015, día en el que se llevan a cabo varias campañas para reivindicar la importancia de comer menos carne. No se pide que se renuncie a este alimento, simplemente que se reduzca el consumo por los beneficios que ello conlleva, tanto para la salud como para el medioambiente. De hecho, y como explicaba el investigador de la Universidad Tecnológica Chalmers (Suecia) David Chalmers Bryngelsson, no es necesario llevar una dieta vegetariana para alcanzar los objetivos climáticos o poder abastecer de alimentos a la población en el futuro.
La organización World Meat Free Day comenta que su objetivo es hacer que al menos 10 millones de personas sustituyan la carne de una de sus comidas por una proteína de origen vegetal, el resultado de este cambio sería una reducción del consumo de agua equivalente a 5.000 piscinas olímpicas, se ahorrarían 2.706 hectáreas de tierra, lo equivalente a 89.000 canchas de tenis y se reduciría la ingesta de 885 millones de calorías entre otros beneficios.
World Meat Free Day comenta que los expertos calculan que para el año 2050 la población del planeta alcanzará los 9.000 millones de habitantes, si no se realizan cambios en la dieta se prevé que sean necesarias unos 200 millones de toneladas de carne adicionales a las que ya se producen, algo insostenible y muy difícil de cumplir. Al respecto os recomendamos leer este post sobre la carne y su eficiencia como alimento, según Jeremy Rifkin, un licenciado en economía, sociólogo, escritor y activista estadounidense que investiga el impacto de los cambios científicos y tecnológicos en la sociedad, la economía y el medio ambiente, para hacer frente al cambio climático y alimentar a la creciente población, es necesario cambiar la dieta y buscar alternativas más eficientes.
Son muchos los expertos que desde hace años dan a conocer estudios en los que se concluye que comer menos carne es esencial para poder frenar el cambio climático, reducir el consumo de recursos tan importantes como el agua, incrementar la disponibilidad de tierras para el cultivo de alimentos vegetales destinados a alimentar a la población, etc. Se han puesto en marcha varias iniciativas que persiguen concienciar a los consumidores, por un lado informándoles sobre los efectos y consecuencias de una producción ganadera intensiva para el medio ambiente y la salud, y por otro con campañas como la de dejar de comer carne un día a la semana. Esta la promovemos en Gastronomía & Cía cada lunes proponiéndoos recetas saludables sin carne (este es el recopilatorio de hoy).
Desde la organización del Día Mundial sin Carne explican que dejar de comer carne una vez por semana no resulta complicado y no cuesta dinero, por el contrario se obtienen muchos beneficios. Es por ello que piden a todas las personas que se hagan seguidores de World Meat Free Day, con ello estarán colaborando para mejorar la salud y la sostenibilidad de nuestro planeta, se logrará reducir de forma significativa la huella del carbono y se contribuirá a impulsar los cambios oportunos que permitan alimentar a la población en el año 2050. Muchas personas se comprometen con este día y de manera simbólica firman un contrato ofrecido en la página de la organización, manifestando su compromiso de dejar de comer carne una vez a la semana.
Comer menos carne es necesario y algo esencial para frenar el cambio climático, os recomendamos leer el último informe del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC), en él se concluye que un cambio en la dieta podría reducir significativamente la emisión de gases de efecto invernadero. Recordemos que el IPCC tiene la misión de proporcionar con evaluaciones científicas comprensivas la información científica, técnica y socioeconómica actual sobre el riesgo de cambio climático provocado por la actividad humana, así como sus potenciales consecuencias medioambientales y socioeconómicas. También brinda las posibles soluciones o alternativas para poder mitigar los efectos del cambio climático o adaptarse a ellos.
Evidentemente la celebración de este día o las iniciativas para reducir el consumo de carne no son del agrado de la industria cárnica, siempre pendiente de los estudios sobre el coste medioambiental de la carne para intentar desacreditarlos. Un ejemplo que se puede citar es esta respuesta de la industria estadounidense al estudio desarrollado por expertos del Weizmann Institute of Science de Israel en el que se trataba el coste medioambiental de la carne.
Reducir el consumo de carne es sencillo, un solo día por semana representa mucho como hemos visto en los ejemplos citados, ese es el compromiso que pide World Meat Free Day, un día sin carne en beneficio del planeta y de la humanidad. Podéis conocer más detalles sobre los beneficios de la reducción de carne en la dieta o comprometeros en la reducción de consumo de este alimento a través de la página oficial de la organización.