El próximo 22 de marzo se celebrará el Día Mundial del Agua 2014 bajo el lema «Agua y Energía«, dos cuestiones que aunque están estrechamente relacionadas, el agua está en una clara desventaja. La generación y transmisión de energía requiere de la utilización de los recursos hídricos, fuentes energéticas como las centrales hidroeléctricas, térmicas o nucleares. Sin embargo, sólo el 8% de la energía total que se genera se utiliza para la extracción, el tratamiento y el transporte del agua, es decir, la relación no es equitativa y esta es la cuestión que se quiere poner de manifiesto este año.
Las Naciones Unidas, en colaboración con los Estados miembros y otras partes interesadas (industria, servicios, etc.), quieren llamar la atención sobre la desigualdad existente en el nexo agua-energía, problema que se vive especialmente en zonas marginales y zonas rurales empobrecidas, las comunidades no tienen acceso al agua potable, carecen de un saneamiento adecuado, no tienen acceso a la alimentación o a los servicios energéticos. Se pretende crear conciencia para el desarrollo de políticas que equiparen la relación agua-energía, poner en práctica un uso más sostenible del agua y la energía en un marco de respeto medioambiental.
Los objetivos del Día Mundial del Agua en esta edición son los siguientes:
- Crear conciencia de las interrelaciones entre el agua y la energía.
- Contribuir a un diálogo político que se centra en la amplia gama de temas relacionados con el nexo de agua y energía.
- Demostrar a través de estudios de casos, a los tomadores de decisiones en el sector energético y el dominio del agua, que los enfoques integrados y soluciones a los problemas energéticos del agua pueden lograr mayores impactos económicos y sociales.
- Identificar la formulación de políticas y los temas de desarrollo de la capacidad en la cual el sistema de las Naciones Unidas, en especial de ONU-Agua y ONU-Energía, puede ofrecer importantes contribuciones.
- Identificar a las principales partes interesadas en el nexo agua-energía y participar activamente en el desarrollo ulterior de esta vinculación, dos temas relevantes para las discusiones posteriores al año 2015.
En la celebración de este día se van a lanzar una serie de mensajes clave que se pueden adaptar a las condiciones de cada país o región para que resulten más eficaces. Son mensajes que van más allá de las prácticas para promover un uso sostenible del agua y la energía. El agua necesita energía y la energía necesita agua, la relación debe ser equilibrada, el agua es necesaria para producir muchos tipos de energía y la energía es necesaria para la extracción, tratamiento y distribución del preciado líquido.
Los suministros son cada vez más limitados y la demanda se incrementa año tras año, agua dulce y energía son dos productos que se demandarán de forma significativa en las próximas décadas, este incremento de demanda presenta grandes desafíos a superar, mucho más complicados en los países en vías de desarrollo y en aquellas economías emergentes. Ahorrar energía es ahorrar agua y viceversa, las opciones relativas a la oferta, la distribución o los precios, tienen un impacto directo sobre el agua y la energía.
Los países más desfavorecidos necesitan con urgencia poder tener acceso a los servicios relacionados con el agua y la energía, actualmente unos 1.300 millones de personas no tienen acceso a la energía, unos 780 millones de personas no tienen acceso al agua potable, millones de personas no tienen acceso al saneamiento, lo que demuestra que agua y energía tienen un impacto significativo a la hora de reducir la pobreza.
Una mejor comprensión de los dos sectores, de sus conexiones y sus efectos, facilitará mejorar la coordinación en las materias, reduciendo problemas y deficiencias. Los responsables de desarrollar políticas, los profesionales y planificadores que trabajan en ambos sectores (agua y energía), pueden adoptar medidas que superen barreras y faciliten una relación más equilibrada, una mayor eficiencia en el uso y un mejor acceso y distribución.
Como podemos comprobar, esta celebración cada año gira en torno a un tema central, y es que este elemento esencial para la vida también lo es para el desarrollo humano y el desarrollo económico. El agua es un bien preciado que cada vez está más limitado y peor repartido, las razones de ello son evidentes, la creciente población mundial demanda más agua para satisfacer todo tipo de necesidades. Anteriormente se ha hablado del uso doméstico, de las políticas de reparto de agua, de la producción alimentaria, este año toca la relación con la producción energética. Podéis conocer todos los detalles de la celebración del Día Mundial del Agua 2014 (World Water Day 2014) a través de la página oficial del evento.