Un proyecto de investigación llevado a cabo por expertos del Laboratorio Nacional de Genómica para la Biodiversidad (LANGEBIO) en México, la Universidad Tecnológica de Texas y la Universidad de Búfalo (Estados Unidos), ha permitido descifrar el genoma del aguacate Hass, la variedad más cultivada a nivel mundial, que fue patentada en 1935 e introducida en el mercado mundial en el año 1960. Además de esta variedad, los investigadores han secuenciado las variedades nativas y genéticamente diferentes de México, Guatemala y las Indias Occidentales (Antillas y Bahamas).
El mapa genético del aguacate permite conocer el origen de este fruto y sentar las bases para llevar a cabo mejoras en la agricultura, gracias a la información sobre la función individual de los genes de la fruta. Gracias a esta información se podrá incrementar la productividad, mejorar la resistencia a las plagas, enfermedades y condiciones climáticas adversas, así como las cualidades organolépticas e incluso permitirá desarrollar aguacates con nuevos sabores y texturas. Los expertos comentan que se trata de un gran avance para la producción del aguacate, cuya demanda crece año tras año en el mercado mundial.
Los investigadores explican que el del aguacate es un cultivo de gran importancia a nivel mundial, y especialmente para México, ya que es el mayor país productor. La mayoría de los consumidores sólo han probado la variedad Hass y, quizá, alguna que otra, pero lo cierto es que existen muchas variedades registradas en el centro de diversidad mexicano del aguacate, un gran conjunto de recursos genéticos de utilidad para dibujar un gran futuro para el aguacate. Los expertos dicen que era necesario secuenciar el genoma del aguacate para lograr que la especie fuera accesible a los trabajos de mejoramiento genómico para identificar los genes de interés que son responsables de los rasgos de este fruto y las características deseadas.
El mapa genético permitirá desarrollar un plan de trabajo para comprender mejor la resistencia a las enfermedades para todos los aguacates, los expertos explican que si se identifica un árbol interesante que parece tener una mejor resistencia, se puede analizar qué genes relacionados con la resistencia son los que tiene activos y dónde se localizan en su mapa genético.
Según los resultados de la investigación, el aguacate Hass heredó alrededor del 61% de su ADN de variedades mexicanas y el 31% de los genes de variedades guatemaltecas, aunque existen muchos tipos de aguacates, ya hemos comentado es la variedad Hass la más cultivada y extendida en el mundo, a pesar de que apenas cuenta con cerca de un siglo de vida. Hay que decir que aunque la variedad se patentó en 1935, fue originada en 1926 por Rudolph Hass, un horticultor aficionado que produjo el aguacate Hass a partir de una semilla de una especie guatemalteca.
El estudio utiliza la genómica para investigar el árbol genealógico de la especie Persea americana, especie arbórea del género Persea que pertenece a la familia Lauraceae y cuyo fruto es el aguacate. Los investigadores comentan que el aguacate pertenece a un grupo relativamente pequeño de plantas llamadas Magnólidas, que se separaron de otras especies de plantas con flores hace unos 150 millones de años. La investigación respalda, pero no prueba, la teoría de que las Magnólidas como grupo son anteriores a las dos líneas dominantes actuales de plantas con flores, las eudicotas y las monocotiledóneas. Si la teoría es correcta, no significaría que los aguacates en sí mismos son más antiguos que las dos líneas mencionadas, sino que pertenecen a una línea hereditaria que se separó de otras plantas con flores anteriormente.
La investigación no permite saber cuántos años tiene el aguacate, ya que el estudio no ha abordado esta cuestión, pero sí se explora cómo el fruto ha cambiado genéticamente desde que se convirtió en especie ramificándose en otras Magnólidas. Parece ser que el aguacate experimentó dos eventos de poliploidía (fenómeno por el cual se originan células, tejidos u organismos con tres o más juegos completos de cromosomas de la misma o distintas especies, o con dos o más genomas de especies distintas), donde se copió todo el genoma del organismo. Los investigadores explican que muchos de los genes duplicados terminaron siendo eliminados, pero algunos desarrollaron nuevas y útiles funcionalidades, genes que se encuentran en los aguacates actuales.
El genoma del aguacate es una herramienta de gran valor que será de ayuda en los próximos años, estaremos atentos a los nuevos trabajos y a los avances que se realicen. Podéis conocer todos los detalles de la investigación a través de este artículo publicado en la página de la Universidad de Búfalo, y en este otro publicado en la revista científica Proceedings of the National Academy of Sciences.
Foto 1 | Kjokkenutstyr.net
Foto 2 | Aguacate, tomate y sal negra