Hay quien considera que, si las tartas o dulces que se consumen son caseros, son más saludables, pero no es del todo cierto, pues uno de los principales enemigos de la salud es el azúcar y precisamente los dulces tradicionales que hemos heredado de nuestros mayores, están cargados de este endulzante. Por eso, cada vez hay más interés en hacer repostería con menos azúcar y controlando las grasas, entre otras cosas. Lo cierto es que hay muchas formas de mejorar la repostería casera, y hoy queremos que lo comprobéis con esta deliciosa crema de avellanas para rellenos y coberturas en repostería.
Ahora bien, debemos advertir que es una crema que puede resultar adictiva, y no dudamos de que os encantará tomarla hasta untada sobre una rebanada de pan, de hecho, si se añade un poco más de cacao en polvo o chocolate fundido, se puede considerar una de las más ricas cremas de avellanas y cacao tipo ‘Nutella’ o ‘Nocilla’ (más bien la primera, porque tiene mucho sabor a avellanas) que hayáis probado.
Sobre el endulzante que utilizamos para esta crema de avellanas para rellenos y coberturas de tartas, magdalenas, crepes… es el eritritol, lo habréis visto ya en algunas de nuestras recetas. Lo elegimos como edulcorante (casi) sin calorías porque utilizamos poca cantidad (si se pone en exceso cambia mucho el sabor) y parece ser que este polialcohol, además de tener un bajo índice glucémico y de no ser absorbido en el tracto intestinal, tiene propiedades anticariogénicas, es decir, no provoca caries.
En cualquier caso, si queréis utilizar otros endulzantes o edulcorantes que se ajusten a vuestra alimentación y a vuestros gustos, podéis utilizarlos en lugar del eritritol. Este edulcorante lo podéis encontrar fácilmente en hipermercados y en tiendas de dietética y nutrición, es apto para diabéticos, celíacos, veganos…
Ingredientes
- 120 gramos de leche en polvo
- 125 gramos de manteca de avellanas (textura semi-liquida)
- 40 gramos de eritritol
- unas gotas de extracto de vainilla
- 1 c/c de cacao puro en polvo (opcional)
- una pizquita de sal.
Elaboración
Si no tienes la manteca de avellanas, puedes hacerla en unos minutos con un procesador o robot de cocina potente, simplemente debes poner las avellanas tostadas en el robot y triturar hasta obtener una pasta semi-líquida. Si tienes que hacerlo en el accesorio de la minipimer o batidora de mano, tendrás que tener un poco más de paciencia e ir triturando y dejando enfriar si se calienta la batidora.
Para preparar la crema de avellanas para repostería pon en el vaso del procesador la leche en polvo, añade la manteca de avellanas, el eritritol y el extracto de vainilla. Si lo deseas, añade el cacao en polvo, como indicamos, es opcional, pero le da un buen punto de sabor.
Añade también una piquita de sal y procede a mezclar a media potencia, ve subiendo la velocidad (en Thermomix lo ponemos a 6 o 7), hasta conseguir una crema de avellanas cremosa, fina y homogénea.
Acabado y presentación
Vierte la crema de avellanas en un tarro con tapa hermética si no la vas a utilizar al momento, la puedes guardar a temperatura ambiente o en la nevera. En este último caso, se endurecerá, y quizá puede ir bien para la preparación de algunas recetas, pero si la necesitas más suave, déjala a temperatura ambiente un rato antes de utilizarla.
Abreviaturas
c/s = Cuchara sopera
c/p = Cuchara de postre
c/c = Cuchara de café
c/n = Cantidad necesaria
1 comentarios
Saludos, muy buena la presentacion y la explicacion de la receta. Muchas gracias y felicitaciones…