Costillas de cerdo glaseadas con pina y hoisin

Volvemos con una receta fácil, rápida de hacer y sorprendente para el paladar, son unas Costillas de cerdo glaseadas con piña y hoisin, un plato muy completo con el que te chuparás los dedos si los utilizas para comer, y con el que se debe servir un buen pan para no dejar rastro de la salsa.

Este es un plato de los que ocupan a todas nuestras papilas gustativas, dulce, salado, ácido, picante, umami… nadie que pruebe estas Costillas de cerdo glaseadas con piña y hoisin terminará de comer sin felicitar al cocinero. Como decíamos, la elaboración es sencilla, sólo hay que procurar darle un buen punto de cocción a cada componente del plato.

Ingredientes (4 comensales)

  • 1 costillar de cerdo (o unas cuatro costillas por comensal)
  • 6 rodajas de piña en su jugo (conserva)
  • 100 gramos del jugo de conserva de piña
  • 60 gramos de salsa hoisin
  • 1 c/c de pimienta aleppo (u otro pimiento picante al gusto)
  • aceite de oliva virgen extra
  • pimienta negra recién molida
  • sal.

Para las judías verdes
  • 400 gramos de judías verdes
  • 10 gramos de raíz de jengibre
  • 1 diente de ajo
  • unas hojas de menta o hierbabuena fresca
  • aceite de oliva virgen extra
  • sal.

Elaboración

Limpia las costillas, retira el exceso de grasa si lo tuviera y corta el costillar en raciones o en porciones que quepan en una amplia sartén para cocinarlas. Lava las judías verdes, despúntalas y retira los posibles hilos de los laterales, pela el jengibre y rállalo, pela y pica el diente de ajo.

Prepara las judías verdes como haces habitualmente, hervidas, escaldadas o cocidas al vapor, para este plato nosotros las hemos hecho al vapor. Mientras tanto, pon la sartén amplia al fuego, pintada con aceite de oliva (las costillas soltarán más grasa) y cuando esté caliente, incorpora las costillas, salpimenta al gusto y deja que se doren por los dos lados a fuego fuerte.

Cuando estén doradas, incorpora el jugo de piña, deja reducir a la mitad a fuego medio, e incorpora entonces la salsa hoisin, las rodajas de piña troceadas y la pimienta aleppo, deja reducir unos minutos más, jugando con la temperatura del fuego, si la carne está casi a punto, pon el fuego un punto más alto para que el glaseado se forme antes. Rectifica de sal al añadir la piña.

En otra sartén con un fondo de aceite, rehoga el ajo y el jengibre, e incorpora las judías verdes y la hierbabuena para que tomen su sabor, si es necesario añade más aceite de oliva.

Emplatado

Sirve las Costillas de cerdo glaseadas con piña y hoisin acompañadas de las judías verdes con jengibre y sin olvidar los trocitos de piña. Termina regando con el jugo del glaseado y ¡Buen provecho!

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